Europa-Asia central
Uzbekistán
-
Clasificación 2024
148/ 180
Puntuación: 37,27
Indicador político
152
28.02
Indicador económico
143
34.49
Indicador legislativo
137
43.59
Indicador social
145
37.96
Indicador de seguridad
136
42.28
Clasificación 2023
137/ 180
Puntuación: 45,73
Indicador político
132
45.52
Indicador económico
132
38.40
Indicador legislativo
120
52.20
Indicador social
147
43.56
Indicador de seguridad
127
48.98

Tras la muerte, en 2016, del presidente Islam Karimov, la situación de los medios no ha mejorado en el país, y la crítica hacia el actual gobierno sigue siendo muy difícil.

Panorama mediático

No existe ninguna cadena de televisión independiente en Uzbekistán. La radio pública transmite la propaganda del poder, las emisoras de radio privadas se abstienen de realizar cualquier crítica por miedo a ser cerradas, y la prensa escrita está al servicio de los intereses del Estado. Sólo unos quince medios digitales, de los cuales varios trabajan desde el extranjero, publican una información de calidad. Es el caso de la agencia de prensa Fergana, con base en Moscú, y de Ozodlik Radiosi, el servicio en uzbeco del medio americano Radio Free Europe / Radio Liberty (RFERL), bloqueado en el país. Aproximadamente un tercio de la prensa utiliza el ruso como idioma.

Contexto político

Las autoridades controlan ampliamente a la prensa, así como a un nutrido grupo de blogueros afines al gobierno. La oposición, compuesta, por un lado, por un movimiento islámico cercano a los talibanes y, por otro, por un grupo de nacionalistas en parte exiliados, está prohibida.

Marco legal

Las autoridades todavía no han puesto en marcha las reformas necesarias para poner fin a las leyes represivas con los medios. La censura, la vigilancia y la autocensura persisten aún. Para conservar su independencia, algunos sitios web locales de información son reticentes a registrarse oficialmente como medios, ante el riesgo de ser perseguidos judicialmente y exponerse a cuantiosas multas por su trabajo.

Contexto económico

Los representantes del poder no dudan en ejercer presiones económicas o intentar corromper a los periodistas. Por otro lado, el auge de medios independientes se ve entorpecido por leyes que restringen su financiación, sobre todo la procedente de organizaciones basadas en el extranjero que apoyan un periodismo libre.

Contexto sociocultural

La juventud, así como la extensa cobertura de acceso a Internet, explica la expansión de las redes sociales, especialmente Odnoklassniki, Facebook y Telegram. Algunos grupos en estas redes facilitan el intercambio de informaciones sobre la corrupción, un asunto con escasa cobertura en los medios oficiales.

Seguridad

Los últimos periodistas encarcelados, en algunos casos durante cerca de 20 años, han sido liberados, pero no han podido volver a ejercer. Los blogueros siguen siendo amenazados o detenidos, tal y como sucedió con Otabek Sattoryi, fundador del canal de YouTube Xalq Fikri (Opinión del pueblo), condenado a seis años y medio de prisión, en mayo de 2021, por un montaje ficticio de extorsión y difamación. Los periodistas que intentaron cubrir su juicio fueron víctimas de violencia o actuaciones judiciales infundadas. La represión contra los periodistas que cubrían las protestas por la independencia de Karakalpakstán pone de manifiesto la voluntad del gobierno de silenciar todas las voces disidentes.