Clasificación 2023
146/ 180
Puntuación: 42,79
Indicador político
125
47.71
Indicador económico
153
34.64
Indicador legislativo
152
37.74
Indicador social
164
32.20
Indicador de seguridad
101
61.68
Clasificación 2022
120/ 180
Puntuación: 48,66
Indicador político
151
40.00
Indicador económico
136
32.65
Indicador legislativo
154
41.23
Indicador social
99
66.00
Indicador de seguridad
99
63.40

Jordania es conocida por su estabilidad política, que contrasta con sus países vecinos. No obstante, la prensa aplica la autocensura y respeta las líneas rojas tácitas sobre qué temas se pueden abordar.

Panorama mediático

La prensa es poco independiente en Jordania. Muchas cadenas de televisión son semi-gubernamentales, como es el caso de Al-Mamlaka. Sin embargo, la cadena privada Roya TV es un medio relevante. Existen también varias emisoras de radio, sostenidas por el gobierno, privadas o comunitarias. A pesar de ello, operan también plataformas independientes, como 7iber y Aramam.

Contexto político

Las autoridades controlan a los medios designando a sus redactores jefe, especialmente en el caso de Jordan TV, Petra News Agency y los diarios Al-Dustour y Al-Rai, además de tener su control financiero. Ciertos medios están en manos del ejército o de ayuntamientos, lo que les permite obtener ciertos privilegios, especialmente para cubrir determinadas partes del país.

Marco legal

Desde la revisión de la ley de prensa, en 2012, las autoridades han fortalecido su control, especialmente sobre Internet. Cientos de sitios han sido bloqueados. Desde que se aprobó la ley sobre ciberdelincuencia, en 2015, determinadas publicaciones online o en redes sociales pueden ser sancionadas con penas de prisión. Los periodistas son muchas veces objeto de persecuciones judiciales, incluso de condenas, en virtud de una ley antiterrorista extremadamente vaga. 

Contexto económico

Las autoridades pueden perseguir judicialmente a los periodistas y obligarles a pagar multas cuantiosas. La Comisión Audiovisual impone también gastos desorbitados para la obtención de licencias. Ante la falta de recursos financieros, especialmente para los medios no controlados por las autoridades, la prensa privada sufre para sobrevivir. En consecuencia, algunos medios eligen no ser críticos con las empresas y personalidades públicas para obtener financiación.

Contexto sociocultural

La población jordana está compuesta de varias comunidades, como los palestinos, los cristianos, los drusos, los circacienses y los armenios, pero este pluralismo está infrarrepresentado en los medios. Ciertos temas, especialmente los ligados a las mujeres, siguen siendo delicados de abordar para los periodistas.   

Seguridad

Los periodistas están sometidos a una vigilancia estrecha por parte de los servicios de inteligencia y deben afiliarse a la Asociación de la Prensa Jordana, controlada a su vez por el Estado. Las citaciones judiciales son frecuentes y contribuyen a ejercer presión sobre los profesionales de la información, siendo éstos liberados a condición de mantener silencio sobre sus investigaciones acerca de temas sensibles.