RDC

Los atentados contra la libertad de prensa disminuyeron un poco cuando Félix Tshisekedi asumió la presidencia, en enero de 2019, sin embargo, la situación sigue siendo alarmante: detenciones, agresiones y amenazas a periodistas; suspensión, saqueo y robo de medios de comunicación. 2019 fue un año sombrío para las provincias afectadas por la epidemia del ébola. Un periodista fue asesinado y algunos reporteros, amenazados. Los medios de comunicación comunitarios que participaron en la lucha contra la enfermedad difundiendo mensajes de prevención fueron abandonados por completo por los responsables de resolver la crisis. El jefe de Estado dijo que trabajaría para que los medios de comunicación constituyan un “verdadero cuarto poder”, pero si el gobierno no emprende medidas concretas, serán sólo promesas. El ambiente en que trabajan los profesionales de la información sigue siendo muy hostil. Es indispensable que se adopte un nuevo marco jurídico que remplace la ley de 1996, que criminaliza los delitos de prensa; también que se establezca un mecanismo que garantice la protección y seguridad de los periodistas. Sin acciones significativas es vana la esperanza de que la situación mejore, tras décadas de agresiones a los profesionales de la información. Durante el mandato de Joseph Kabila se banalizó la violencia y reinó la impunidad: diez periodistas fueron asesinados y nunca se hizo justicia por estos crímenes. En lo que respecta a la libertad de informar en línea, a menudo se corta la conexión a internet y se bloquea el acceso a las redes sociales, como sucedió en las últimas elecciones presidenciales.