Clasificación 2024
99/ 180
Puntuación: 54,1
Indicador político
110
42.27
Indicador económico
142
34.64
Indicador legislativo
69
67.47
Indicador social
71
66.96
Indicador de seguridad
112
59.16
Clasificación 2023
96/ 180
Puntuación: 57,86
Indicador político
124
47.76
Indicador económico
148
35.13
Indicador legislativo
68
67.61
Indicador social
77
68.37
Indicador de seguridad
93
70.45

La libertad de prensa y la independencia de los medios en Albania están amenazadas por los conflictos de intereses entre el entorno económico y el entorno político, un marco jurídico débil y una regulación partidista. Los periodistas sufren actos de intimidación por parte de los políticos y el crimen organizado. 

Panorama mediático

Los medios albaneses más influyentes están en manos de un puñado de empresas relacionadas con el entorno político que operan en sectores estrictamente regulados, como la construcción. Aunque existen cientos de medios digitales en el país, solo una minoría tiene un modelo empresarial sólido y una financiación transparente. Entre los principales medios se encuentra la radiotelevisión pública RTSH, Top Channel, TV Klan RTV Ora. 

Contexto político

Los periodistas están sometidos a presiones políticas, especialmente durante los periodos electorales. La clase política amenaza la independencia de las redacciones a través de la politización de los órganos reguladores de los medios y del nombramiento de los directivos de los medios públicos, como sucedió con la designación de una persona próxima al partido para dirigir la RTSH en 2023. Los periodistas críticos se enfrentan regularmente a ataques para desacreditarlos, tanto por el gobierno como por los partidos de la oposición, y les resulta difícil obtener información pública, una traba que puede verse reforzada por la reciente centralización de la comunicación gubernamental.

Marco legal

Aunque la libertad de prensa está garantizada por la Constitución y los compromisos jurídicos internacionales contraídos por Albania, la protección de la confidencialidad de las fuentes sigue siendo deficiente, como puso de manifiesto la incautación, en 2023, del material del periodista de investigación Elton Qyno. Por otro lado, tras una  controvertida decisión de un fiscal, se prohibió a los medios cubrir las repercusiones de un ciberataque perpetrado en 2022 contra instituciones estatales.

Contexto económico

Gran parte del mercado de los medios albaneses está en manos de cuatro o cinco empresas. La financiación pública representa una parte importante de los ingresos de los medios, pero su distribución opaca  y discriminatoria levanta las sospechas de tráfico de influencias.

Contexto sociocultural

Los profesionales de los medios que investigan sobre el crimen organizado y la corrupción son objeto de amenazas. Las periodistas, mayoritarias dentro de la profesión, se enfrentan al acoso en Internet y a la discriminación de género en las redacciones, cuyos avances en este sentido son, sin embargo, bienvenidos. La autocensura es habitual, pero a pesar de esta amenaza, varios medios han creado una plataforma para la autorregulación ética, una primicia en Albania.

Seguridad

Los reporteros que cubren manifestaciones y operaciones policiales son, en ocasiones, víctimas de la violencia policial, si bien el crimen organizado es una de las mayores amenazas para la integridad física de los periodistas. Aunque la policía se ha movilizado recientemente para perseguir las agresiones a los profesionales de los medios, la impunidad de los crímenes cometidos contra ellos, unida a los intentos políticos de desacreditarlos, crea un clima que puede favorecer nuevos ataques a periodistas. En marzo de 2023, el ataque sin precedentes al edificio de Top Channel con disparos de armas automáticas se saldó con la muerte de un agente de seguridad del medio.