Un soldado estadounidense es acusado de haber divulgado un video que prueba que el ejército cometió un grave error

El soldado estadounidense Bradley Manning fue acusado el martes 6 de julio de haber transmitido un video que mostraba un ataque aéreo del ejército estadounidense durante el que dos empleados de la agencia informativa Reuters encontraron la muerte. El joven soldado de 22 años de edad se encuentra actualmente en un centro de detención del ejército estadounidense en Kuwait, acusado de haber divulgado información confidencial, señaló el ejército estadounidense en un comunicado. El sitio de Internet Wikileaks publicó el 5 de abril de 2010 un video que mostraba un bombardeo del ejército estadounidense sobre Bagdad, en julio de 2007, durante el que una decena de personas fueron asesinadas, entre ellas dos empleados de Reuters: el fotógrafo Namir Noor-Eldeen, de 22 años de edad, y su chofer, Said Chmagh, de 40 años. Según Wikileaks, el video provenía de “fuentes militares” no precisadas entonces. En 2007 Reuters hizo una solicitud oficial para tener acceso a los documentos que explican la muerte de sus dos empleados, esto, en virtud de la Freedom of Information Act (Ley de Libertad de Información, FOIA por sus siglas en inglés), que obliga a las agencias federales a trasmitir sus documentos a toda persona que haga una solicitud oficial (salvo las excepciones estipuladas en la ley). Sin embargo, nunca se dio seguimiento a la solicitud de la agencia informativa. Esta acusación tiene lugar días después de que Robert Gates publicara un memorándum por la “laxitud” que reina en el departamento de Defensa en cuanto a las relaciones de los militares con los medios de comunicación. Éste hecho reabre el debate sobre la falta de transparencia del Pentágono y plantea el problema de la compatibilidad de esas directivas con la Freedom of Information Act. ‘‘Sin la comunicación de este video por el joven soldado Bradley Manning no tendríamos pruebas del evidente error del ejército estadounidense. El respeto del reglamento militar no debe en ningún caso actuar en detrimento de la Freedom of Information Act”, declaró Reporteros sin Fronteras. “El departamento de Defensa estadounidense no debe esconderse tras las reglas para practicar abiertamente actos de censura, negando por ello el derecho fundamental de la opinión pública al acceso a la información”. Votada en 1966 en el contexto de la guerra de Vietnam, la Freedom of Information Act respondía a la solicitud de la opinión pública de estar informada sobre los documentos de la administración estadounidense, salvo excepciones. Bajo la presidencia de Ronald Reagan esta ley sufrió numerosas restricciones debido al uso abusivo de la excepción n°1 relativa a la “seguridad nacional”. Esperamos que la administración de Obama no cometa las mismas violaciones a este derecho y demuestre más honestidad y transparencia en el respeto del derecho al libre acceso a la información, derecho fundamental reconocido para todos los individuos de una sociedad que pretende ser democrática.
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Updated on 20.01.2016