Reporteros sin Fronteras está indignada por la detención, sin juicio y desde hace siete meses, de Abdel Rahman Shagouri, primer caso conocido de ciberdisidente encarcelado en Siria. La organización está preocupada por la salud de Abdel Rahman Shagouri, al que habrían torturado durante su detención.
Reporteros sin Fronteras está indignada por la detención, sin juicio y desde hace siete meses, de Abdel Rahman Shagouri, primer caso conocido de ciberdisidente encarcelado en Siria. Fue detenido el 23 de febrero de 2003, en un puesto de control situado cerca de Damasco, por haber enviado por e-mail el boletín informativo del sitio prohibido www.thisissyria.net (Levant News). Se encuentra detenido en secreto en la cárcel de Saidnaya (cerca de Damasco), en espera de comparecer ante el Tribunal Supremo de la Seguridad del Estado, un órgano judicial conocido por sus procedimientos expeditivos.
La organización está preocupada por la salud de Abdel Rahman Shagouri, al que habrían torturado durante su detención. "Pedimos al presidente sirio, Bachar El-Assad, la inmediata liberación de Abdel Rahman Shagouri", ha manifestado Robert Ménard, secretario general de Reporteros sin fronteras. "El jefe del Estado sirio es un apasionado de las nuevas tecnologías. Por otra parte, en otro tiempo estuvo al frente de la Asociación Siria de Informática. Deseamos, por tanto, recordar al presidente El-Assad que no puede haber desarrollo sostenible de Internet sin respetar la libertad de expresión", ha añadido.
Abdel Rahman Shagouri, casado y padre de dos hijos, vive en Birajam, un pueblo cercano a la capital siria. Según Amnistía Internacional, el día de su arresto registraron su casa. Unos agentes de la policía secreta habrían confiscado entonces su ordenador, algunos CD-Rom, y otros objetos relacionados con la informática.
Según informaciones recogidas por Reporteros sin Fronteras, Abdel Rahman Shagouri habría sido torturado, a su paso por los locales de la "sección Palestina" de los servicios secretos militares sirios. Le habrían herido seriamente en la cabeza. En este momento continúa detenido en secreto, y no tiene autorización para que le represente un abogado.
Debería juzgarle en diciembre un tribunal militar, el tribunal Supremo de la Seguridad del Estado, cuyas sentencias no pueden apelarse. Podrían condenarle a entre ocho y doce años de cárcel.
El ciberdisidente habría enviado por e-mail el boletín informativo diario de la página web prohibida Levant News. Ese sitio, al que a principios de año no se podía acceder desde Siria, publica informaciones políticas y entre otras cosas noticias de los presos políticos sirios. El editor del sitio, Obeida Nahas, ha dicho a Reporteros sin Fronteras que en Siria están censurados muchos otros sitios de Internet, y que incluso el correo Hotmail.com estuvo temporalmente bloqueado, durante este año.