Algunas de las recientes medidas adoptadas por la administración iraní denotan una voluntad de reforzar el control de la Red. La empresa iraní Delta Global ha sido elegida por el gobierno para crear un nuevo sistema de censura de la Web.
Prohibidos varios sitios, se gesta una reestructuración del sistema de filtrado
Algunas de las recientes medidas adoptadas por la administración iraní denotan una voluntad de reforzar el control de la Red. La empresa iraní Delta Global ha sido elegida por el gobierno para crear un nuevo sistema de censura de la Web. Reporteros sin Fronteras condena este modelo liberticida de gestión de la Red, y recuerda que Irán participa activamente en las discusiones sobre el gobierno de Internet, que se celebran en el marco de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información (SMSI).
“En primer lugar, las nuevas medidas indican un endurecimiento ideológico del poder iraní, así como la voluntad del nuevo presidente, Mahmud Ahmadinejad, de centralizar el poder. En segundo lugar, ponen de manifiesto que existen clanes en el propio seno de los conservadores ya que el último sitio prohibido, Baztab.com, está dirigido por personas cercanas al Guía Supremo de la República, el ayatolá Jamenei. Finalmente, estamos preocupados por las declaraciones de la empresa a quien parece que se ha concedido la gestión de los filtros iraníes. Si se demuestra que son fundadas las declaraciones del director de esa sociedad, deberían acentuarse la vigilancia y la censura en la Red. Se trata de una mala noticia para los bloggers y los internautas iraníes”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
A finales de septiembre Rahim Moazemi, director de la sociedad Delta Global, declaró a la agencia local de prensa ISNA que su sociedad había ganado el concurso de ofertas, creado por el gobierno, relativo a la gestión del sistema de control y censura de la Red. Añadió que pretendía acabar con “la anarquía de los proveedores de acceso a Internet (FAI)”, centralizando el sistema de filtrado. Finalmente aseguró que la tecnología de Delta Global es capaz de bloquear el acceso a todas las herramientas que sirven para eludir la censura.
En este momento los filtros iraníes funcionan gracias a la tecnología “smart filter”, de la empresa norteamericana Websense. Sin embargo, según ésta, las autoridades iraníes nunca han pagado la licencia de ese programa. La censura del Net iraní no es homogénea y varía según el FAI utilizado; existen varios cientos en el país. Así, un mismo sitio puede ser accesible en una ciudad y estar bloqueado en otra.
Desde principios de septiembre son inaccesibles al menos cuatro sitios “femeninos” (www.womeniran.org, http://irwomen.com, www.iftribune.com, www.womeniw.com) que, entre otras cosas, tratan sobre la condición de la mujer iraní. Los responsables de estas publicaciones han reaccionado poniendo una petición en línea: http://www.petitiononline.com/mod_perl/signed.cgi?womeno.
Por otra parte, el 12 de octubre la justicia prohibió “provisionalmente” el sitio informativo Bastab.com. Sin embargo, esa publicación pertenece a Mohssen Rezai, un ex comandante de los Guardianes de la Revolución, cercano al ayatolá Jamenei, y estaría apoyada por los servicios de inteligencia iraníes. Baztab publicaba informaciones molestas para el jefe del Estado. Según su director, Foad Sadeghi, se habría prohibido el sitio como consecuencia de una denuncia del secretariado del Alto Consejo de Seguridad Nacional, a causa de algunos artículos que hablaban de las negociaciones nucleares en curso. El bloqueo de este sitio es un síntoma de las luchas internas en el campo conservador; es decir, entre los partidarios de Mahmud Ahmadinejad y los del Guía Supremo de la República Islámica. En efecto, al parecer el presidente iraní, apoyado por los militares, intenta hacerse con el control del aparato interno del Estado e intenta imponer a su mentor, el ayatolá Mesbah, como sucesor de Jamenei.
La segunda fase del SMSI se celebrará en Túnez entre el 16 y el 18 de noviembre de 2005. En las reuniones preparatorias del evento Irán se ha pronunciado a favor de un “nuevo modelo” de gobierno de Internet, para terminar con la hegemonía de Estados Unidos en el sector.