Reporteros sin fronteras preocupada por la suerte de los periodistas iraquíes retenidos como rehenes

Cuando las fuerzas del orden iraquíes han encontrado el cuerpo de Othman Al-Machahadani, corresponsal del diario saudí Al Watan, Reporteros sin Fronteras manifiesta su enorme preocupación por la suerte de los doce profesionales de los medios de comunicación que permanecen como rehenes en el país. “Las cifras son estremecedoras, pero todavía no se ha puesto en marcha ninguna medida para poner fin a la hecatombe de periodistas, y sus colaboradores. El nivel de violencia con los periodistas no tiene precedentes. Son perseguidos, secuestrados, torturados y después cobardemente ejecutados, sin que nunca se moleste a sus secuestradores. Hacemos un llamamiento al Primer Ministro iraquí, Nuri al-Maliki, para que no se contente con rendir homenaje a los periodistas muertos. Tiene que movilizar a su gobierno para salvarles la vida, y proteger su trabajo”, ha declarado la organización. Según las informaciones recogidas por Reporteros sin Fronteras, el 6 de abril de 2007 encontraron en Bagdad el cuerpo sin vida del periodista Othman Al-Machahadani, de 29 años. La autopsia ha revelado que le dispararon en la cabeza y el torso. Fue secuestrado el 4 de abril en el barrio de Al-Ghazaliyah, al norte de la capital. Los secuestradores pidieron un rescate, pero la familia del periodista no consiguió mantener el contacto con ellos. Othman Al-Machahdani trabajaba en Al Watan desde octubre de 2006. Este nuevo asesinato recuerda prácticamente hasta en los menores detalles el secuestro y asesinato de Khamail Khalaf, la corresponsal de Radio Free Europe/Radio Liberty. Unos hombres armados secuestraron a la periodista el 3 de abril de 2007 a la salida del trabajo, en el barrio de las universidades, en la parte oeste de Bagdad. Su cuerpo, acribillado a balazos, apareció el 5 de abril en la capital. Khamail Khalaf trabajada desde 2004 en el servicio en árabe de RFE/RL, radio norteamericana con sede en Praga. En otro caso, un fallecimiento más ha venido a aumentar el balance del atentado contra la sede de la televisión sunnita por satélite Bagdad TV, ocurrido el 5 de abril de 2007. Un camión bomba fue lanzado contra el edificio y después los asaltantes continuaron el ataque con armas ligeras. El director adjunto del canal, Thaer Ahmed Jabr, encontró la muerte en el atentado, que causó al menos nueve heridos, tres de ellos en estado grave. El canal ha anunciado que en el atentado murió otro empleado, aunque sin precisar su nombre. Bagdad TV, propiedad del Partido Islámico Iraquí, está dirigida por el vicepresidente Tareq al-Hachemi. La programación tuvo que ser interrumpida y se sustituyó por una grabación de lecturas del Corán. Desde marzo de 2003, siete empleados del canal han sido víctimas de la guerra. El 5 de abril, el Primer Ministro Nuri al-Maliki rindió homenaje a los periodistas iraquíes víctimas de la guerra desde 2003. En la misma ocasión, justificó una vez más las restricciones impuestas a los medios de comunicación en Irak. Entre otras cosas, hace dos años ordenó la prohibición de Al-Jazira. “El gobierno, para proteger nuestros territorios y en interés del pueblo, ha tenido que tomar medidas limitadas contra algunos medios de comunicación...que utilizan un lenguaje provocador y partidario, lleno de arrogancia y odio”, explicó.
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Updated on 20.01.2016