Reporteros sin Fronteras preocupada por la degradación de la libertad de prensa

En un intento de asesinato del director de Telesistema, Carlos Muñoz Insúa, el 9 de febrero mataron a su chófer, Ricardo Mendoza. Reporteros sin Fronteras denuncia el clima de violencia e intimidación contra la prensa, que se ha instalado desde el comienzo del año 2004.

Reporteros sin Fronteras manifiesta su gran inquietud por la reciente degradación de la libertad de prensa en Ecuador. La organización condena firmemente el asesinato de Ricardo Mendoza, chófer de Carlos Muñoz Insúa, director de Telesistema, en un atentado cometido contra este último el 9 de febrero de 2004. Reporteros sin Fronteras denuncia igualmente las presiones que la radio La Luna y Radio Quito padecen desde hace varias semanas. El 9 de febrero de 2004 dos hombres armados dispararon siete balas sobre el vehículo de Carlos Muñoz Insúa, director ejecutivo del canal de televisión nacional Telesistema, mientras estaba parado en un semáforo en la ciudad de Guayaquil (sudoeste del país). El periodista no resultó herido pero murió el chófer del vehículo, Ricardo Mendoza. Según las informaciones difundidas por la Agencia France-Presse (AFP) el 11 de febrero, el atentado ha sido reivindicado por las Milicias Revolucionarias del Pueblo (MRP), un grupo que se autodenomina "terrorista". Ese grupo, que acusa a Telesistema de no emitir sus comunicados, declaró que tiene la intención de cometer otros ataques, profiriendo amenazas contra otros medios de comunicación y periodistas. Por otra parte, las MRP afirmaron que lamentan la muerte de Ricardo Mendoza quien, según sus declaraciones, no era el objetivo del atentado. Tensiones en torno a los medios críticos con el poder
Entre el 26 y el 27 de enero de 2004, Miguel Rivadeneira, director de Radio Quito, recibió amenazas de muerte por teléfono, en cinco ocasiones. Las amenazas, anónimas, estaban relacionadas con la entrevista de uno de los generales de las Fuerzas Armadas Ecuatorianas, en relación con un posible tráfico de armas, en el que se sospecha que pueda estar implicado el ejército. El 3 de febrero, la edición de noche del canal Teleamazonas reveló que el gobierno habría emprendido gestiones, con varias administraciones, para conseguir el cierre de la radio privada La Luna, cuyas declaraciones críticas consideraron calumniosas el presidente Lucio Gutiérrez, y su equipo. La Luna se manifestó firmemente en contra cuando las autoridades detuvieron al líder indio Humberto Cholango, en diciembre de 2003. La emisora difundió ampliamente las críticas expresadas por sus oyentes, en aquella ocasión y cuando el atentado perpetrado el 1 de febrero de 2004 contra el Presidente de la CONAIE (Confederación de Nacionalidades Indígenas). El 4 de febrero, el comité de ética de la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión (AER), citó a Paco Velasco, director de la radio, para preguntarle por el asunto. Al día siguiente, el servicio de comunicación del gobierno declaró públicamente que las autoridades no tenían intención de cerrar la radio. El 4 de febrero, en varios medios de comunicación y grupos políticos se difundió un documento estratégico, atribuido a los servicios secretos de las Fuerzas Armadas Ecuatorianas. El documento incluye una especie de "lista negra" de elementos que amenazan a la estabilidad del país en la que figuran, entre otros, las radios La Luna y Visión, el diario El Comercio y los nombres de varios periodistas. Posteriormente las Fuerzas Armadas desmintieron ser las autoras del documento.
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Updated on 20.01.2016