Reporteros sin Fronteras pide que se aclaren completamente los fallecimientos del periodista Hussein Al Jabouri, muerto a consecuencias de las heridas tras escapar a un atentado en febrero de 2007, y de Hamid Al-Douleimi, cuyo cuerpo apareció l 19 de marzo de 2007 en la morgue de Bagdad. Por otra parte, la organización manifiesta su gran preocupación por el secuestro de dos empleados de Radio Dijla.
Reporteros sin Fronteras ha tenido conocimiento de la muerte de dos periodistas iraquíes, que han sido blanco de grupos armados en Irak. Estos asesinatos elevan a 155 el número de profesionales de los medios de comunicación muertos en Irak desde el comienzo del conflicto, en marzo de 2003. El pasado 16 de marzo Reporteros sin Fronteras reunió a 153 militares y voluntarios, que simbólicamente exhibieron los retratos de 153 periodistas franceses vivos, para llamar la atención del público sobre los estragos provocados por los ataques a la prensa Irak. Cuando ha pasado menos de una semana, el balance ya ha aumentado.
“Queremos aplaudir la determinación y el valor de decenas de periodistas que siguen ejerciendo su profesión a pesar de los atentados, secuestros y emboscadas que diariamente se dirigen contra la prensa. Es urgente que las autoridades iraquíes creen estructuras de seguridad, y jurídicas, para combatir la impunidad que provoca el que estos ataques continúen”, ha declarado la organización.
El 19 de marzo de 2007 apreció en la morgue de Bagdad el cuerpo de Hamid Al-Douleimi, de 37 años, realizador del canal de televisión Al-Nahrain (“las dos orillas”). Le habían secuestrado dos días antes, a la salida de los locales del canal. Según los informes de la autopsia, al periodista le turturaron. A otros dos empleados de Al-Nahrain les mataron en mayo de 2006, después de detenerles en un control falso, en la capital iraquí.
En otro caso, el 16 de marzo de 2007 sucumbió a sus heridas, en un hospital de Amman, el redactor jefe del diario Al-Safir, Hussein Al Jabouri, de 63 años. El periodista fue trasladado a Jordania después de que el 11 de febrero cayera en una emboscada delante de su domicilio de Bagdad, en la que resultó gravemente herido.
Por otra parte se sigue sin noticias de Karim Manhal, de 48 años, cronista de Radio Dijla, secuestrado el 17 de marzo de 2007 junto con su chofer, Thamir Sabri, en el barrio de Al Jami'a, en Bagdad. Cuatro hombres armados y encapuchados interceptaron su vehículo, cerca de los locales de la emisora. El secuestro no ha sido reivindicado.