Los secuestradores dejan en libertad a Riad Alí, el periodista druso israelí de CNN

Riad Alí, periodista e intérprete del canal norteamericano CNN, secuestrado el 27 de septiembre por la noche en el centro de la ciudad de Gaza, quedó en libertad al día siguiente y fue entregado a la policía palestina. Reporteros sin Fronteras se alegra por su rápida liberación, pero insiste ante la Autoridad Nacional Palestina acerca de la necesidad de una investigación seria y rápida para elucidar las inquietantes circunstancias del secuestro, identificar a los autores y llevarles ante la justicia. El secuestro del periodista de CNN ha tenido el efecto inmediato de intimidar al conjunto de los periodistas, extranjeros y locales, que trabajan en la franja de Gaza. El jefe de la policía palestina, el general Saed Al-Ajez, afirmó que le entregaron a Riad Alí el 28 de septiembre al comienzo de la noche, sin precisar quién. Poco antes de su liberación, una cinta de vídeo mostró a Riad Alí cautivo, diciendo que le habían secuestrado las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa. Explicaba que él, y otros drusos de su familia, habían realizado el servicio militar en el ejército israelí. Después, pedía a los drusos que no participaran en acciones del ejército israelí, porque su causa es la misma que la de los palestinos. Anteriormente, la organización de las Brigadas de los Mártires de Al-Aqsa negó cualquier implicación en el secuestro del periodista de CNN, condenando este tipo de actos, que calificó de "perjudiciales" para la causa palestina, y apelando a la liberación de Riad Alí. __________________________________________________ 28.09.2004 Reporteros sin fronteras pide la inmediata liberacion del periodista Riad Ali Un reportero druso de nacionalidad israelí, que trabaja como intérprete y periodista en el canal norteamericano de televisión CNN, fue secuestrado el 27 de septiembre de 2004 en Gaza. Riad Alí, de unos treinta años, fue raptado por un grupo de hombres armados hacia las 18,30 horas en el barrio de Rimal, en el centro de Gaza, cuando se dirigía hacia el hotel junto con sus colegas norteamericanas, el corresponsal Ben Wedeman y la fotógrafa Mary Rogers. Reporteros sin Fronteras condena con firmeza el secuestro, cuyo motivo todavía se desconoce, lo mismo que la identidad de los secuestradores. La organización reclama la liberación inmediata e incondicional del periodista y hace un llamamiento a todas las facciones y grupos armados palestinos a respetar la libre circulación de movimiento de los periodistas, cualquiera que sea su nacionalidad. Por otra parte, la organización pide al ejército israelí que reconsidere su decisión de prohibir el acceso a la franja de Gaza a los periodistas israelíes. El año pasado se adoptó una decisión semejante. Después, los periodistas israelíes han continuado accediendo a la franja de Gaza, con la condición de que firmen un documento exonerando al ejército israelí de cualquier responsabilidad en lo relativo a su seguridad. Según Ben Wedeman, corresponsal de la CNN y testigo de la escena, un joven palestino armado con un fusil AK-47 bajó de un automóvil Peugeot 504, que cortó el camino al taxi en el que viajaba el equipo de CNN. "Bajó un hombre y sacó un revolver, lo apoyó en el parabrisas y preguntó quién de nosotros era Riad Alí. Riad respondió con calma: "Soy yo", y le ordenó que le siguiera". Indicó que los secuestradores no iban enmascarados. "Vamos a Gaza con mucha frecuencia. Mucha gente nos conoce y, en conjunto, siempre hemos podido operar allí sin problemas, indicó también Ben Wederman. Es un ambiente generalmente hospitalario. Nunca había tenido que vérmelas con unos hombres que salían de un vehículo y apuntaban con un fusil sobre mi cabeza". De momento, los secuestradores no han efectuado ninguna reivindicación. El portavoz de Hamas en la franja de Gaza, Munir Al-Masri, ha negado categóricamente cualquier responsabilidad de su organización en el secuestro: "Condenamos los secuestros de periodistas, que son contrarios a las intereses de los palestinos". La franja de Gaza registró en julio una oleada sin precedente de secuestros de extranjeros y palestinos, sobre el fondo de los enfrentamientos interpalestinos y del caos de seguridad. Hasta el momento, los reporteros extranjeros se han visto relativamente poco afectados, o impedidos de realizar su trabajo, por grupos de activistas palestinos. Riad Alí trabajó de 1998 a 2000 en el canal israelí Channel One. En 2000 se encargaba de los reportajes realizados en los Territorios Palestinos, entre otros en la franja de Gaza, donde realizó varias entrevistas a combatientes palestinos enmascarados. Riad Alí fue despedido en 2002, por divergencias de opinión con la dirección, y posteriormente fue contratado como periodista e intérprete por el canal norteamericano CNN.