Las agencias de prensa son el blanco de las fuerzas iraquíes y norteamericanas

El 7 de septiembre de 2005, Abdul Kamil Hassan, camarógrafo de la agencia Associated Press Televisión News (APTN), fue el blanco de las fuerzas armadas iraquíes. Aunque resultó gravemente herido, su vida no corre peligro. “Pedimos al ejército iraquí que dé lo antes posible explicaciones sobre las circunstancias del incidente que estuvo a punto de costar la vida a Abdul Kamil Hassan. En pocos meses, las fuerzas destinadas a restablecer el orden en Irak -el ejército y la policía iraquíes, así como el ejército norteamericano- se han convertido en auténticos verdugos, para los reporteros”, ha declarado Reporteros sin Fronteras. “Los periodistas iraquíes y árabes, que trabajan para las agencias internacionales de prensa, juegan un papel indispensable, ya que son los únicos que pueden comunicarnos informaciones sobre este país, que camina hacia el caos. Las autoridades iraquíes y norteamericanas tienen que adoptar medidas enérgicas para frenar el incremento de las amenazas y los peligros que sufre el personal de las agencias de prensa”, ha añadido la organización. Abdul Kamil Hassan resultó herido mientras grababa, en la ciudad de Samarra (a 100 km. al norte de Bagdad), el lugar en que se había encontrado una bomba de fabricación casera. Los soldados del ejército iraquí, que estaban encargados de investigarlo, le siguieron y le dispararon. El camarógrafo recibió una bala en el brazo y otra en el vientre. Posteriormente, los soldados le trasladaron al hospital de Samarra, donde continúa hospitalizado. La agencia Associated Press (AP) se ha visto particularmente afectada, desde el comienzo de la guerra en Irak. Saleh Ibrahim, uno de sus camarógrafos, murió el 23 de abril de 2005, en una explosión que probablemente iba dirigida contra las fuerzas armadas norteamericanas. A Ismail Taher Mohsin, uno de los colaboradores de la agencia, le mataron el 2 de septiembre de 2004. Finalmente, Sami Shouker Naji, periodista de APTN, se encuentra detenido en la cárcel de Abu Ghraib desde el 30 de marzo de 2005, con el pretexto de haber colaborado con “los insurgentes”. La semana pasada, los periodistas locales de la agencia de prensa Reuters también pagaron el precio de la violencia en Irak. A Waleed Khaled, técnico de sonido de Reuters TV, le mataron el 28 de agosto de 2005, mientras que el camarógrafo Haider Khadem, que le acompañaba, resultó ligeramente herido y fue retenido durante tres días por las fuerzas norteamericanas. En cuanto a otro camarógrafo de Reuters TV, Alí Omar Abrahem Al-Mashadani, se encuentra detenido por el ejército norteamericano desde el 10 de agosto de 2005. Por otra parte, unos fotógrafos de la Agencia France-Presse y de Reuters fueron recientemente maltratados por miembros de la policía iraquí. Decidieron denunciarlo ante el Primer Ministro.
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Updated on 20.01.2016