“Representa un inmenso alivio conocer la liberación de Jill Carroll. La movilización no ha sido en vano. El valor y la tenacidad de su familia han sido ejemplares. Nuestro agradecimiento para todos cuantos, en todo el mundo, se han movilizado por la joven periodista, y especialmente para los grandes medios de comunicación árabes. Continuaremos movilizándonos mientras no queden en libertad, a su vez, los tres reporteros iraquíes Rim Zeid, Maruane Khazaal y Alí Abdullah Fayad”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
“Representa un inmenso alivio conocer la liberación de Jill Carroll. La movilización no ha sido en vano. El valor y la tenacidad de su familia han sido ejemplares. Nuestro agradecimiento para todos cuantos, en todo el mundo, se han movilizado por la joven periodista, y especialmente para los grandes medios de comunicación árabes. Continuaremos movilizándonos mientras no queden en libertad, a su vez, los tres reporteros iraquíes Rim Zeid, Maruane Khazaal y Alí Abdullah Fayad”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
Reporteros sin Fronteras recuerda la enorme preocupación que siente por el recrudecimiento de los secuestros y asesinatos de periodistas en Irak. “Al día de hoy, y desde que comenzó el conflicto, el 20 de marzo de 2003, han muerto al menos 86 periodistas y colaboradores de los medios de comunicación, y otros 39 han sido secuestrados en el país. Esa violencia dirigida resulta indignante y pone en peligro la existencia de una información independiente en Irak”, ha añadido la organización.
El 30 de marzo de 2006, Tarek el Hachimi, jefe del Partido islámico de Irak, indicó a la Agencia France-Presse (AFP) que por la mañana habían liberado a Jill Carroll. Pocas horas después, una fuente del Ministerio del Interior iraquí aseguró que la periodista se encontraba en buena salud, y era trasladada a la “zona verde” (de seguridad) de Bagdad. La familia y la redacción de Jill Carroll han confirmado su liberación.
Jill Carroll, que trabaja para el diario norteamericano Christian Science Monitor, así como para algunos medios de comunicación italianos y jordanos, fue secuestrada el 7 de enero de 2006 en el barrio de Adel, al oeste de Bagdad. Su intérprete, Allan Enwiyah, murió por disparos en el lugar del secuestro.
Ayer, Katie Carroll, hermana gemela de la periodista, hizo un llamamiento a los secuestradores de la periodista, en los canales árabes de televisión.
En las últimas semanas, varios religiosos sunnitas de Irak, y del mundo, habían pedido su libertad.
Los periodista Rim Zeid y Maruane Khazaal, del canal de televisión Al-Sumariya, fueron secuestrados en Bagdad el 1 de febrero de 2006. Alí Abdullah Fayad, periodista del trisemanal Al-Safir, fue raptado n Kout (al sudeste de la capital) el 21 de mazo de 2006.