El Tribunal Supremo de Arbitraje confirma la liquidación judicial de TV6

El Tribunal Supremo de Arbitraje confirma la liquidación judicial de TV6

En una carta dirigida a Vladimir Putín, Presidente de la Federación de Rusia, Reporteros Sin fronteras (RSF) ha denunciado, el 11 de enero, la confirmación por el Tribunal Supremo de Arbitraje de Moscú de la liquidación de TV6, el último canal independiente de televisión con cobertura nacional en Rusia. "Vladimir Putín ha conseguido sus fines: en un año, la totalidad de los medios de comunicación independientes de audiencia nacional han pasado a estar controlados por el Estado, o han sido cerrados por poderosas compañías estatales que actúan por cuenta del poder", ha declarado Robert Ménard, Secretario General de la organización. "La deliberada política de sumisión y de recuperación de los últimos bastiones democráticos, incluida la justicia, deseada por el presidente, devuelve a Rusia a su triste pasado totalitario", ha añadido Robert Ménard. Según informaciones recogidas por RSF, el Tribunal Supremo de Arbitraje de Moscú, la mayor instancia jurídica de Rusia, confirmó, el 11 de enero de 2002, la liquidación de TV6, el último canal independiente de audiencia nacional. A finales de diciembre, un tribunal federal revocó la decisión del 26 de noviembre de 2001, que suponía la liquidación de TV6; pero el vicepresidente del Tribunal Supremo de Arbitraje, Eduard Renov, apeló la decisión ante el Tribunal Supremo, el 4 de enero de 2002. Los abogados del canal pensaban presentar próximamente el caso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. RSF recuerda que la denuncia encaminada a conseguir el cierre del canal de televisión TV6 por "mala gestión" fue presentada en septiembre de 2001 por la compañía petrolera del Estado Loukoil-Garant, propietaria del 15% de las acciones de TV6 a través de un fondo de pensiones. El canal TV6, cuyo principal accionista es Boris Berezovski, contrató en mayo de 2001 a los periodistas del canal de la oposición NTV así como a algunos de sus programas, excluidos de su medio de comunicación cuando, en la primavera de 2001, el gigante del gas Gazprom se hizo con el control, en una operación orquestada desde el Estado. Desde su incorporación, algunos de los programas obtuvieron un gran éxito de audiencia. El canal, que también conseguía mucha publicidad, se ha mostrado muy crítico en el poder.
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Updated on 20.01.2016