El director de Nichane condenado a tres años de cárcel, con suspensión de la pena: Reporteros sin fronteras denuncia una sentencia escadalosa

El tribunal de primera instancia de Casablanca condenó, el 15 de enero de 2007, al director de publicación del semanario Nichane, Driss Ksikes, y a la periodista Sanaa Elaji, a tres años de cárcel, con el cumplimiento de la pena en suspenso, y una multa de 80.000 dirhams (equivalentes a 7.200 euros). Por otra parte, ha condenado al semanario a dos meses de suspensión. “Naturalmente nos sentimos aliviados por la decisión de los jueces, que no han seguido la petición del procurador, particularmente severa e injusta. Pero, a pesar de todo, nos parece escandaloso que se suspenda un periódico simplemente por haber publicado unas historias divertidas, relativas al reino y al Islam. La condena de tres años de cárcel, con el cumplimiento en suspenso, del director de Nichane y una de sus periodistas, va a pesar como una espada de Damocles sobre la cabeza de esa valiente redacción”, ha declarado Reporteros sin Fronteras, uno de cuyos representantes asistía a la lectura de la sentencia. “Cuando se acercan las elecciones legislativas, hacemos un llamamiento a las autoridades marroquíes para que den muestras de moderación con los medios de comunicación. Los periodistas tienen que poder informar libremente a la población, incluso sobre algunos temas que molestan a las autoridades, u ofenden a los adeptos de una religión”, ha añadido la organización. Al conocer la sentencia, la redacción de Nichane manifestó su alivio. “La justicia se ha pronunciado soberanamente. Nos sentimos satisfechos de que no se haya mantenido la prohibición de ejercer, y de que la condena haya quedado en suspenso, incluso a pesar de que consideramos que tres años son muchos”, declaró Ahmed Benchemsi, director del semanario francófono Tel Quel, perteneciente al mismo grupo de prensa que Nichane. “Tiene que cambiar la ley de prensa. Las autoridades ya lo anunciaron. Espero que lo hagan”, añadió. El 20 de diciembre de 2006, el gobierno marroquí decidió prohibir Nichane, cuando habían pasado más de diez días de la salida de su edición nº 91, del 9-15 de diciembre, que incluía un dossier titulado: “Bromas: como se ríen los marroquíes de la religión, el sexo y la política”. Posteriormente, la fiscalía de Casablanca decidió denunciar al director de publicación y a la periodista, autora del artículo, por “atentado a la religión islámica” y “publicación y distribución de escritos contrarios a la moral y a las costumbres”. Tras la primera vista, que se celebró el 8 de enero de 2007, el fiscal solicitó para Driss Ksikes y Sanaa Elaji una condena de tres a cinco años de prisión incondicional, así como la prohibición de ejercer y una multa de entre 10.000 y 100.000 dirhams (es decir, entre 895 y 8.950 euros). También solicitó el cierre definitivo del periódico. El semanario en lengua árabe Nichane, que se publicó por primera vez en septiembre de 2006, vendía cerca de 15.000 ejemplares semanales antes de que lo suspendieran.