Reporteros sin Fronteras se ha declarado enormemente preocupada por la prolongada detención de Alan Johnston, corresponsal británico de la BBC secuestrado el 12 de marzo de 2007, en Gaza. “Un llamamiento, efectuado desde Riad, por el conjunto de los jefes de Estado árabes, revestiría una gran importancia en el desenlace de este secuestro”, ha declarado la organización.
Cuando el periodista Alan Johnston, de la radiotelevisión pública British Boradcasting Corporation (BBC), inicia su tercera semana de detención, Reporteros sin Fronteras incita a los jefes de Estado que asisten a la Cumbre de la Liga Arabe, que se celebra los días 28 y 29 de marzo de 2007 en Arabia Saudí, a hacer un llamamiento conjunto por su liberación.
“Un llamamiento, efectuado desde Riad por el conjunto de los jefes de Estado árabes, revestiría una gran importancia en el desenlace de este secuestro. Cada vez estamos más preocupados por la suerte de Alan Johnston, del que no se tienen noticias desde hace 15 días. Ninguno de los periodistas secuestrados desde 2005 en la franja de Gaza había permanecido detenido tanto tiempo”, ha declarado la organización.
“Si, como aseguran muchas fuentes locales, es cierto que las autoridades palestinas conocen la identidad de los secuestradores, les pedimos que lo antes posible lleven a cabo negociaciones para conseguir que el periodista recobre la libertad y vuelva con su familia. No se ha hecho pública ninguna reivindicación”, ha añadido Reporteros sin Fronteras.
El 25 de marzo de 2007 se celebró una nueva concentración de periodistas palestinos cerca de la plaza del Soldado Desconocido, en Gaza, para protestar por el secuestro del corresponsal británico. En el centro de la ciudad se ha colgado un retrato gigante de Alan Johnston.
Desde agosto de 2005 han secuestrado a catorce periodistas extranjeros en la franja de Gaza. La mayoría quedaron en libertad rápidamente, sin sufrir violencia. En el caso de dos periodistas norteamericanos, retenidos durante catorce días, el secuestro lo reivindicó un grupo desconocido, “Las brigadas de la Yihad Santa”, que exigía que en 72 horas quedaran en libertad todos los musulmanes detenidos por Estados Unidos. Para muchos observadores, preguntados por Reporteros sin Fronteras durante una misión efectuada en diciembre de 2006, estos dos permanecieron detenidos más tiempo que sus colegas a causa de su nacionalidad. Hay que decir que, en los otros doce casos, los secuestradores no tenían ninguna motivación política.