Ataque a las oficinas de la AFP en Jordania; contraofensiva mediática del régimen sirio

JORDANIA

Reporteros sin Fronteras condena con firmeza el ataque a las oficinas de la Agencia France-Presse en Ammán. El 15 de junio de 2011 una decena de hombres armados con palos ingresó a las instalaciones de la agencia; destruyeron muebles y teléfonos, tiraron al suelo los documentos. Este ataque ocurre después de que la directora de la oficina de Ammán, Randa Habib recibiera amenazas. Esto, tras la publicación, el 13 de junio, de una nota sobre el ataque del convoy del rey Abdalá. “Recibí una llamada telefónica en la que me amenazaban y me advertían que pagaríamos caro nuestro comportamiento”, señaló Randa Habib a Reporteros sin Fronteras. “Este ataque es una nueva advertencia que tiene el objetivo de asustarnos, pero las actividades de la Agencia France-Presse continuarán normalmente”, agregó Randa Habib. “Este comportamiento es propiamente incomprensible en un país que se define como un Estado de Derecho. Estos actos de violencia física y verbal ponen en entredicho de forma grave el trabajo de los periodistas y, con ello, la libertad de expresión y de información”, expresó por su parte Emmanuel Hoog, director general de la AFP. La policía comenzó de inmediato a recabar las huellas digitales y a estudiar los testimonios de los periodistas. Por otra parte, al día siguiente del ataque se organizó una manifestación en apoyo a la agencia, en la que participaron numerosos periodistas y políticos. No es la primera vez que la AFP es víctima de intimidaciones. El 9 de febrero de 2011 la agencia publicó una nota sobre las acusaciones de corrupción que hacían algunas tribus beduinas contra Rania Al-Abdallah. Tras ello, el palacio emprendió medidas discriminatorias contra la agencia. Desde entonces, los periodistas no reciben, por ejemplo, la agenda de las autoridades, así como los anuncios de las visitas oficiales o de las intervenciones del rey, contrariamente a lo que sucede con los otros medios de comunicación y agencias de prensa. Por su gran trayectoria y su experiencia en el país, la AFP es una fuente preciosa de información. Reporteros sin Fronteras espera que no se bloquee más su trabajo.

YEMEN

Reporteros sin Fronteras expresa su preocupación por el continuo agravamiento de la situación de la libertad de expresión en Yemen. “Desde el inicio de las manifestaciones que piden la partida del presidente Ali Abdalá Saleh, en febrero, presenciamos una verdadera campaña contra la prensa. Periodistas han sido atacados, secuestrados, y la distribución de periódicos obstaculizada. Tales exacciones se han vuelto prácticas cotidianas de las autoridades yemenís, que buscan reprimir la cobertura de los acontecimientos en el país. Estas prácticas son inaceptables. Exhortamos a las autoridades a poner fin al hostigamiento de los periodistas”, declaró la organización. Recientemente, un grupo llamado las “Brigadas de Venganza de Yemen y del presidente Saleh", cercano al gobierno, amenazó en un comunicado difundido en Internet, con asesinar a todos los opositores del presidente y atacar los periódicos y sitios web afiliados a la oposición. Un primer ataque tuvo lugar el 14 de junio, cuando hombres armados tomaron por asalto las oficinas del diario independiente Al-Adhwaa en Saná. Destruyeron las instalaciones, atacaron a los periodistas que se encontraban en el lugar y se llevaron varios ordenadores y un generador. Además, el sitio web del periódico fue pirateado. Se trata del tercer intento de piratería que sufre el diario en tres meses. Esto, tras la publicación de artículos que critican la política del partido en el poder. El 15 de junio pasado Faysal Makral, director de publicación del diario Al-Ghad y corresponsal de Al-Hayat, recibió por teléfono amenazas de muerte. Informó de ello al Ministerio del Interior. Por otra parte, según el Sindicato de Periodistas Yemenís, el 8 de junio pasado un militar habría amenazado con secuestrar al periodista Abdul Karim Al-Khaiwani. Este eminente reportero, quien fue editor en jefe del diario en línea prodemocrático Al-Shoura y recibió el premio Periodismo de Derechos Humanos bajo Amenaza (award for Human Rights Journalism under Threat), de Amnistía Internacional UK en 2008, quedó atrapado en una calle interceptada por soldados, cerca de la casa del vicepresidente. El militar en guardia se negó a dejarlo pasar y amenazó con arrestarlo. El periodista pudo escapar. El mismo día, las fuerzas del orden atacaron al corresponsal de Al-Hurra y a su camarógrafo cuando cubrían una concentración frente a la casa del vicepresidente en la capital.

SIRIA

Finalmente, Reporteros sin Fronteras denuncia la campaña mediática emprendida por el gobierno sirio, que pretende desacreditar el movimiento de protesta. El 15 de junio las autoridades presentaron a la prensa una “segunda fosa común” en Jisr al Shughur, en el noreste del país, en el marco de un viaje de prensa muy controlado. También invitaron a los periodistas a cubrir una manifestación a favor del régimen de Damasco. Por otra parte, el régimen sirio intentó reivindicar su imagen haciendo algunas concesiones, como la amnistía del 31 de mayo pasado. Gracias a esta decisión, el periodista y escritor Ali Al-Abdallah, condenado a tres años de prisión por “intención de perjudicar las relaciones de Siria con otro Estado”, fue liberado el 4 de junio pasado. La organización también está preocupada por la situación del bloguero Kamal Sheikhou. Liberado bajo fianza el 10 de mayo pasado, debía comparecer el 30 de mayo por la “publicación de información que tienen como consecuencia el perjuicio del honor de la nación”. No circula ninguna información al respecto.

LIBIA

Reporteros sin Fronteras expresa su alivio por la liberación, el 12 de junio de 2011, de Majdi Hilal, camarógrafo de MBC, tras más de dos meses de detención. Este periodista egipcio de 43 años de edad fue arrestado en Ajdabiya la tarde del 6 de abril, junto con su colega Hassan Zeitouni, periodista argelino, cuando se dirigían al frente, en Brega. Este último fue puesto en libertad la noche del 9 de abril de 2011 y pudo dejar el país algunos días después.
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Updated on 20.01.2016