n una conferencia de prensa organizada el 20 de julio en los locales de Reporteros sin Fronteras, Gisèle Khoury, la esposa de Samir Kassir, así como William Bourdon, abogado de la mujer, y Jean Martin, abogado de la organización, han asegurado que todo el mundo debe "hacer su papel, en París y en Líbano" para aumentar las posibilidades de conocer la verdad, en este caso.
En una conferencia de prensa organizada el 20 de julio en los locales de Reporteros sin Fronteras, Gisèle Khoury, la esposa de Samir Kassir, así como William Bourdon, abogado de la mujer, y Jean Martin, abogado de la organización, han asegurado que todo el mundo debe "hacer su papel, en París y en Líbano" para aumentar las posibilidades de conocer la verdad, en este caso.
Gisèle Khoury declaró entre otras cosas que « esperaba mucho de la justicia francesa, pero se mantenía escéptica en cuanto a la justicia libanesa". Explicó que Samir Kassir recibió amenazas de muerte en diciembre de 2000, y luego estuvo vigilado y seguido, durante 40 días, por los servicios de inteligencia libaneses. Los canales libaneses de televisión recibieron la orden de no volver a invitar al periodista a los diferentes talk shows políticos, según su esposa.
"Queremos que exista una voluntas política fuerte, de parte francesa y libanesa a la vez" declaró por su parte William Bourdon, abogado de Gisèle Khoury y de sus dos hijas. "La cooperación entre ambos Estados debe ser lo más intensa posible. Es ingenuo pensar que va a ser fácil la identificación de los responsables. El caso debe avanzar lo más rápido posible. Es absolutamente necesario que se dé una dinámica poderosa entre la comisión internacional de investigación y los dos jueces de instrucción, Bruguiere y Coirre, nombrados por la Fiscalía de París. El tiempo acucia, hay que ir deprisa, hay personas dispuestas a testimoniar rápidamente".
Por su parte, el letrado Jean Martin, abogado de Reporteros sin Fronteras, que se constituyó en parte civil junto al Fiscal de la República en el marco del proceso, insistió acerca del esfuerzo que debe hacer el Estado libanés para aclarar completamente este trágico atentado:
"Es importante que se conozca la verdad sobre los propios asesinos, pero también sobre los autores intelectuales. Esperamos que el Estado libanés se comprometa a poner todos los medios humanos y materiales necesarios para una cooperación eficaz. Se necesitaría también un compromiso fuerte de la comunidad internacional ».
Samir Kassir falleció el 2 de junio de 2005, a las 10,45 hora local (7,45 hora GMT), en la explosión de su coche, un Alfa Romeo blanco, aparcado delante de su domicilio en el barrio cristiano de Achrafieh, al este de Beirut.
Editorialista desde hacía diez años en el diario moderado An-Nahar ("El Día » en árabe, con una tirada de 55 000 ejemplares), escritor e historiador, Samir Kassir tenía 45 años y poseía la doble nacionalidad franco-libanesa. Era corresponsal del canal francófono internacional TV5 y durante mucho tiempo colaboró en el mensual francés Le Monde diplomatique. También era profesor de ciencias políticas en la Universidad Saint-Joseph de Beirut.
El periodista, famoso por su postura antisiria y sus denuncias del « régimen policial libanés », estaba perseguido y amenazado desde hacía años. En 2000, fue atacado por unos agentes de la Seguridad general libanesa. Le quitaron el pasaporte libanés. Después, Samir Kassir explicó que constantemente le seguían los servicios de inteligencia líbano-sirios. Entonces, lo tomó bajo su protección el ex primer Ministro asesinado Rafic Hariri. Su último editorial, publicado el 27 de mayo y titulado « Metedura de pata tras metedura de pata », estigmatizaba « la continuación de la represión en Siria".
Era uno de los miembros fundadores del Movimiento de la Izquierda Democrática (oposición), y participó ampliamente en los movimientos de protesta anti-siria de la primavera de 2005