Apple contra Thinksecret: Reporteros sin Fronteras pide que se respete el principio de la confidencialidad de las fuentes

Desde hace varios meses, la empresa Apple pide que tres publicaciones digitales le digan qué fuentes informativas han utilizado para algunos de sus artículos, en los que se refieren a ella. Este caso plantea la cuestión de los derechos y protecciones que deben concederse a los editores de los sitios de Internet, y a los webloggers.

Desde hace varios meses, la empresa Apple pide que tres publicaciones digitales le digan qué fuentes informativas han utilizado para algunos de sus artículos, en los que se refieren a ella. Este caso plantea la cuestión de los derechos y protecciones que deben concederse a los editores de los sitios de Internet, y a los webloggers. Reporteros sin Fronteras estima que los periodistas digitales, lo mismo que algunos responsables de sitios y algunos webloggers cuya actividad constituye un auténtico trabajo periodístico, tienen que disfrutar de la misma protección legal que los periodistas de la prensa tradicional. "Consideramos que el principio de confidencialidad de las fuentes es esencial para el ejercicio del periodismo. Privar de esta protección a los editores digitales representaría un peligroso precedente para la libertad de expresión. Pedimos que los tres sitios implicados en este caso sean totalmente considerados como medios de comunicación, y disfruten así de los mismos derechos", ha declarado la organización. El gigante norteamericano de la informática acusa a las tres publicaciones -Appleinsider.com, Powerpage.org y Thiksecret.com- de haber difundido informaciones confidenciales sobre algunos de sus productos. Intenta saber si alguno de sus empleados se encuentra en el origen de la fuga. En el caso de Thinksecret, Apple llevó el asunto a los tribunales el 4 de enero de 2005. La empresa acusa al sitio de haber divulgado"secretos comerciales" y pide daños y perjuicios. Se trata, entre otras cosas, de un artículo sobre el último Mac "mini" -que cuesta menos de 500 $- publicado a finales de diciembre de 2004, antes del lanzamiento oficial del producto. Los abogados de Nicholas Ciarelli, el estudiante que gestiona el sitio, invocaron el derecho a proteger las fuentes informativas, reconocido a los periodistas. El debate se centró entonces, tanto en la prensa como en el tribunal, sobre la aplicación de este tipo de protección a un periodista, no profesional, que trabaja únicamente en un medio de comunicación electrónico. Por tanto, el juez tendrá que responder a una cuestión clave del derecho de la prensa e Internet: ¿un weblogger, o un editor de un sitio personal, puede disfrutar de la misma protección que los periodistas profesionales, en particular en lo que se refiere al secreto de las fuentes? Por lo que se refiere a los otros dos sitios, Apple intentó conseguir las información directamente de sus responsables, o dirigiéndose a sus proveedores de acceso (FAI). Así, en diciembre de 2004 pidió a Nfox, la empresa que gestiona la conexión a Internet de Powerpage, que le facilitara los e-mails recibidos por Jasón O'Grady, el editor del sitio, en el marco de una investigación sobre el producto "Asteroid". Después, Apple escribió directamente a la asociación de defensa de las ciberlibertades Electronic Frontier Foundation (EFF), que defiende a Powerpage y a Appleinsider en este asunto, para exigirle la misma información. En efecto, el derecho norteamericano autoriza este tipo de solicitud, llamada "subpoena", aunque precisando que el interesado puede negarse a darla, en cuyo caso el diferendo debe decidirlo un juez. Reporteros sin Fronteras recordó la necesidad de proteger a los responsables de sitios, y a los webloggers, con ocasión de la reunión preparatoria de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información, celebrada en febrero de 2005, en Ginebra. La organización publicó entonces cinco recomendaciones, relativas a la libertad de expresión en Internet. La última establece: "Los responsables de publicaciones digitales, incluidos los webloggers y los responsables de sitios personales, tienen que disfrutar de la misma protección y la misma consideración que los periodistas profesionales ya que, como ellos, hacen uso de una libertad fundamental: la libertad de expresión". Consultar las cinco recomendaciones (en francés)
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Updated on 20.01.2016