Suisse 2022 - ES

Si bien el panorama mediático suizo goza de un servicio público audiovisual fuerte (SSR-SRG) y de una prensa escrita tradicionalmente muy diversa, ésta es víctima, desde hace varios años, de una concentración inédita derivada de la transición digital y de sus consecuencias. Entre las principales cabeceras de la prensa escrita de la Suiza francófona destacan 24 heures, la Tribune de Genève, Le Temps y La Liberté y, en la Suiza germánica, Blick, Tages-Anzeiger, Neue Zürcher Zeitung y Basler Zeitung.

Los periodistas suizos permanecen a salvo de las presiones políticas, a pesar de la cercanía que mantienen algunos medios con determinados partidos políticos. El grupo público audiovisual dispone, sin embargo, de garantías sólidas contra la injerencia del poder político en la configuración de programas.

Aunque los periodistas trabajan en un entorno legal y normativo que respeta en general la libertad de prensa, los jueces se muestran en ocasiones reacios a aplicar íntegramente la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en materia de libertad de información. Además, el parlamento parece inclinarse a favor de un endurecimiento de las “medidas cautelares” que permiten a un juez de lo civil suspender una publicación con efecto inmediato y con carácter provisional.

A pesar de que el panorama mediático suizo es tradicionalmente muy diverso, la concentración de los medios se ha acelerado considerablemente en los últimos años. Esta tendencia se ha hecho notar especialmente en el ámbito de la prensa local, que ha visto cómo varias cabeceras desaparecían o eran compradas por grandes grupos de prensa, en posición dominante. El parlamento aprobó un importante refuerzo de las subvenciones públicas a los medios, pero esta decisión ha dividido a la sociedad, que la ha rechazado en referéndum.

Algunos movimientos de la sociedad civil pueden, con sus acciones, reforzar trabas culturales a la libertad de prensa, que llevan a formas de censura o autocensura. Por ejemplo, en 2021, militantes antirracistas o que se reivindicaban defensores de la causa feminista o LGTBQ+ han realizado llamamientos a determinados medios para que retiren contenidos satíricos y, en un intento de intimidación, han causado presuntamente daños materiales en los vehículos de trabajo de una redacción.

Desde el inicio de la crisis sanitaria, los periodistas han sido tomados como blanco de los ataques de activistas contrarios a las medidas sanitarias para luchar contra la pandemia de Covid-19; una tendencia que arrancó en el otoño de 2020. En algunos casos, las protestas se saldaron con insultos, amenazas e incluso agresiones físicas contra los reporteros.