Comoras

Si bien la libertad de prensa está garantizada por la Constitución de 2001, revisada en 2018, la autocensura sigue siendo una práctica común entre los periodistas de las Comoras, a causa de las severas penas con las que se castiga la difamación. Los periodistas sufren principalmente de una grave falta de recursos y de capacitación. Intimidaciones, agresiones, detenciones, amenazas, censura... Las tensiones políticas que marcaron el referéndum constitucional de 2018 y la reelección del presidente Azali Assoumani en 2019 se vieron acompañadas por un aumento significativo e inusual de los ataques a la libertad de prensa, lo que obligó a los periodistas comorenses a abandonar el territorio por su propia seguridad, además de que los periodistas extranjeros salieron del archipiélago tras ser detenidos. En 2020, varios periodistas fueron arrestados arbitrariamente, lo que llevó al Sindicato Nacional de Periodistas de Comoras a denunciar la sistematización de "la noche en comisaría", de la que los profesionales de los medios de comunicación son víctimas habituales. En cuanto a los medios públicos, la suspensión de dos periodistas de la Oficina de Radio y Televisión de las Comoras por presiones del gobierno ha empañado el impulso de apertura observado recientemente. Las presiones a veces son muy fuertes y vienen directamente de arriba, como ocurrió cuando el gobierno amenazó con acciones legales a un periodista comorano de un diario independiente tras revelar disfunciones en la gestión de la crisis del coronavirus.