Un periodista detenido por rebelión
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Reporteros sin Fronteras ha manifestado su preocupación por la detención, el 20 de agosto, de Emiro Goyeneche, de la radio Sarare Estéreo, en Saravena (Arauca). Acusado de "rebelión" y sospechoso de colaborar con la guerrilla del ELN (Ejército de Liberación Nacional), el periodista fue detenido por las acusaciones de presuntos desertores de la guerrilla.
En una carta dirigida al fiscal general, Luis Camilo Osorio, Robert Ménard, secretario general de Reporteros sin Fronteras, le ha pedido que se resuelva con urgencia la situación judicial del periodista, y que se respeten sus derechos. "El departamento de Arauca es uno de los más peligrosos para los periodistas, esta detención no debe representar un nuevo atentado a la libertad de prensa. Las acusaciones contra Emiro Goyeneche no pueden basarse únicamente en las indicaciones de unos presuntos desertores de la guerrilla. La utilización de tales informaciones podría provocar graves errores judiciales", ha añadido.
El miércoles 20 de agosto de 2003, Emiro Goyeneche, uno de los principales presentadores de Sarare Estéreo, radio local de la ciudad de Saravena, fue detenido en el curso de una operación militar, mientras presentaba su programa matinal. La justicia le acusa de "rebelión".
El periodista, detenido junto con otras 29 personas igualmente acusadas de "rebelión", fue inmediatamente trasladado a Bogotá. Desde el 22 de agosto se encuentra internado en una cárcel de la capital. Su abogado, Daniel Acevedo, afirma que el caso no tiene fundamento, y para sus colegas la detención es un "error". El periodista está acusado sobre la base de las indicaciones facilitadas por unos presuntos desertores de la guerrilla del ELN. En precedentes oleadas de detenciones, llevadas a cabo por el gobierno siguiendo indicaciones de esos presuntos desertores, la justicia tuvo que dejar en libertad a muchos acusados, por falta de pruebas contra ellos.
A principios de abril, el periodista se marchó de Saravena después de que su nombre apareciera en una lista de los paramilitares de extrema derecha y se había refugiado en Bogotá, donde se beneficiaba del Programa de Protección de Periodistas. Sin embargo, había decidido regresar a Saravena, y reanudar sus actividades en la radio. Posteriormente, dejó de difundir cualquier información "delicada", para evitar fricciones con los grupos armados y las autoridades.
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20.01.2016