Treinta y un periodista heridos en cargas policiales

El gobierno sanciona a tres oficiales, entre los que se encuentra el jefe de policía de Islamabad Reporteros sin Fronteras pide al presidente Pervez Mussharraf que adopte medidas enérgicas para aclarar completamente la violencia policial que tuvo lugar el 29 de septiembre en Islamabad y Peshawar. Tras una primera serie de sanciones judiciales, el gobierno tiene que llevar a lo tribunales a quienes dieron las órdenes, y a quienes las ejecutaron con tanta violencia. En total, resultaron heridas más de 80 personas. "Tomamos acta de la decisión del gobierno de suspender al jefe de policía de Islamabad y a dos oficiales, como consecuencia de una decisión del Tribunal Supremo. Es un primer paso importante, pero el gobierno federal tiene que castigar a todos los culpables y actuar de forma que este tipo de incidentes no ocurran nunca más, entre otras cosas llamando al orden a todos los policías", ha manifestado Reporteros sin Fronteras. El 29 de septiembre de 2007 la policía hirió al menos a treinta profesionales de los medios de información en Islamabad, al intentar impedirles que cubrieran la represión de una manifestación de abogados, opuestos a la candidatura del general Pervez Musharraf a la elección presidencial. Abogados y periodistas resultaron heridos a culatazos, y también como consecuencia de las piedras que los policías lanzaron en Islamabad. Veintinueve periodistas tuvieron que ser hospitalizados; algunos de ellos presentaban heridas graves. Según la Federación Nacional de Periodistas Paquistaníes (NUPJ), varios hospitales se negaron a facilitar certificados médicos a los periodistas heridos, por temor a que los usaran para denunciar a la policía. En la capital, a un reportero le arrastraron del pelo varios metros, mientras que a dos de sus colegas les pegaban. A varios camarógrafos les rompieron el material. En Peshawar, Khalilur Rehman, camarógrafo de Aaj TV, tuvo que ser hospitalizado tras recibir una paliza de la policía antiditurbios. Por mostrar escenas de la violencia, varios canales privados de televisión permanecieron durante varias horas retirados de la oferta de los operadores de cable. El 1 de octubre, por orden del Tribunal Supremo, el gobierno sancionó a Marwat Alí Shah, jefe de la policía de Islamabad, y a dos oficiales. "Shah tiene que ser suspendido y detenido porque es el responsable de lo que ocurrió el sábado", manifestó por la mañana Iftikhar Mamad Chaudhry, presidente del Tribunal Supremo, tras visionar las imágenes de la violencia. La NUJP instituyó el 30 de septiembre como un "Día negro", en señal de protesta por la violencia. Se celebraron manifestaciones en mayores ciudades del país. Mientras, la prensa paquistaní calificaba el incidente de "Batalla de la avenida de la Constitución".