Alarmada por la carencia total de informaciones sobre la suerte de Alí Astamirov, corresponsal de la AFP en Inguchia y Chechenia, cuando se cumple un año de su secuestro, Reporteros sin Fronteras se ha dirigido al Grupo de Trabajo sobre las desapariciones forzosas o involuntarias de Naciones Unidas, así como al Consejo de Europa.
Un año después de su secuestro, ocurrido el 4 de julio de 2003 en Inguchia, no se tiene ninguna noticia sobre la suerte de Alí Astamirov, corresponsal de la Agencia France-Presse (AFP) en Inguchia y Chechenia.
Reporteros sin Fronteras se ha dirigido al Grupo de trabajo sobre las desapariciones forzosas o involuntarias, de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, con el fin de que ponga en marcha un procedimiento para establecer la verdad de este caso, y vigile para que las autoridades rusas e inguchas pongan todos los medios necesarios para encontrar el rastro del periodista desaparecido.
La organización también ha pedido al secretario general del Consejo de Europa, Walter Schwimmer, y al presidente de la Asamblea Parlamentaria, Peter Shieder, que creen una comisión ad hoc para el caso de la desaparición de Alí Astamirov, y que usen toda su influencia con las autoridades rusas e inguchas, para que redoblen sus esfuerzos en la investigación.
"Ignoramos si el periodista está todavía vivo, quienes son sus secuestradores y cuales las razones de su secuestro. La ausencia total de informaciones sobre la suerte de Alí Astamirov es alarmante. No debemos permitir que caiga en el olvido el caso de este periodista, que trabajaba en una región extremadamente peligrosa, en la que escasea la información", ha manifestado Robert Ménard, secretario general de Reporteros sin Fronteras.
Los investigadores que llevan el caso en Moscú y en la fiscalía de Nazran, en Inguchia, no han conseguido ningún resultado. Ni la familia, ni la AFP, han recibido ninguna petición de rescate, ni ningún secuestrador ha intentado ponerse en contacto con ellas.
Alí Astamirov fue secuestrado por un grupo de hombres armados en el pueblo de Altievo, a 3 km. de Nazran, la principal ciudad de Inguchia, hacia las 20 horas del 4 de julio de 2003, y ante los ojos de sus colegas.
De 34 años de edad en el momento de los hechos, el periodista tiene nacionalidad chechena y es padre de dos niños. Colaboraba con la AFP desde hacía un año. Antes había trabajado para una radio privada de Grozny y, entre 1998 y el 1 de octubre de 1999, fecha del inicio de las operaciones militares, para la versión chechena del canal ruso de televisión NTV.
En los meses anteriores a su secuestro recibió diversas amenazas anónimas y tuvo que cambiar de domicilio, temiendo por su seguridad. Esas amenazas, así como la ausencia de petición de rescate, parecen indicar que a Alí Astamirov le secuestraron por su trabajo de periodista.
Por iniciativa de Reporteros sin Fronteras, diez periodistas, ex rehenes en Líbano, Filipinas y Colombia, hicieron un llamamiento en octubre de 2003, pidiendo la libertad de Alí Astamirov. "Hoy está reducido al silencio uno de los escasos periodistas que cubrían este terrible conflicto y su secuela de exacciones", afirmaron.
Los periodistas que participaron en ese llamamiento son : Roger Auque, rehén en Líbano en 1987, Maryse Burgot, rehén en Jolo (Filipinas) en 2000, Scott Dalton, rehén en Colombia en 2003, Jean-Jacques Le Garrec, rehén en Jolo (Filipinas) en 2000, Jean-Paul Kauffmann, rehén en Líbano de 1985 a 1988, Andreas Lorenz, rehén en Jolo (Filipinas) en 2000, Roland Madura, rehén en Jolo (Filipinas) en 2000, Ruth Morris, rehén en Colombia en 2003, Jean-Louis Normandín, rehén en Líbano de 1986 a 1987 y Philippe Rochot, rehén en Líbano en 1986.