Reporteros sin Fronteras pide a las autoridades judiciales que respeten el derecho a la protección de las fuentes

Reporteros sin Fronteras quiere hacer patente su apoyo a Jorge Van Krieken y Joaquin Eduardo Oliveira, periodistas del diario 24 Horas, perseguidos en justicia por publicar la lista de los propitarios de los números de teléfono de varias personalidades que podrían estar implicadas en el mayor escándalo de pedofilia del país. El 28 de febrero de 2006, el Tribunal de instrucción criminal de Lisboa ordenó el embargo de sus ordenadores, invocando el artículo 44 del código penal, y estimando que son culpables de “crimen de acceso ilegal a datos personales”. El 13 de enero, los periodistas de 24 Horas publicaron un artículo titulado “En el caso de Casa Pía se han grado 80.000 llamadas telefónicas de los más altos representantes del Gobierno”. Entre los propietarios de números de teléfono figuraban el Presidente de la República. Procedían de la empresa Portugal Telecom. El 16 de febrero se efectuó un registro en la redacción y se confiscaron los ordenadores de ambos periodistas. « Queremos manifestar nuestro apoyo a los periodistas, y a la dirección de 24 Horas, víctimas de una violación del secreto de las fuentes. Pedimos a las autoridades judiciales que respeten ese derecho en los profesionales de la prensa. Un respeto que tiene que prevalecer sobre el crimen que el juez de instrucción imputa a los periodistas; a saber: publicar ficheros de la empresa Portugal Telecom. Evidentemente, este crimen parece menor en comparación con las informaciones dadas por los periodistas, en un caso grave que afecta a la opinión pública », ha declarado Reporteros sin Fronteras. « Visto el embrollo judicial que presenta el caso de Casa Pía, no nos parece justificada la violación del secreto de las fuentes de los periodistas de 24 Horas . Recordamos el artículo 38-2 de Constitución portuguesa, para hacer que se respete ese derecho », ha añadido la organización. El caso de Casa Pía estalló en 2002, cuando la prensa portuguesa reveló los testimonios de un centenar de niños y adolescentes, que se quejaban de agresiones sexuales. La Casa Pía es una institución caritativa pública para huérfanos jóvenes y niños desfavorecidos. Durante más de treinta años, varios cientos de niños han estado sometidos a los abusos de algunos notables. El primer juicio por pedofilia se inició el 23 de septiembre de 2003; luego se celebró otro el 25 de noviembre de 2004. Fueron inculpadas varias personalidades del mundo de la televisión o la política. La investigación continúa abierta. Recientemente, un centenar de periodistas han firmado una petición, pidiendo al gobierno que apoye a la prensa, que está viéndose maltratada en este caso. La Comisión parlamentaria de Derechos y Libertades debería recibirles el 30 de marzo. Los periodistas del diario 24 Horas han apelado la decisión del juez de instrucción, autorizando el acceso a sus fuentes. Su demanda ha sido aceptada y esperan comparecer próximamente ante el Tribunal de Casación.
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Updated on 20.01.2016