Otro programa de radio local suprimido por presiones políticas

Reporteros sin Fronteras quiere manifestar su solidaridad con los periodistas que actualmente se movilizan contra los intentos del gobierno de Néstor Kirchner de silenciar las voces críticas. Esa intolerancia ya se hecho patente en la supresión de programas, el despido de periodistas y la retirada, o la atribución discriminatoria, de la publicidad pública.

Reporteros sin Fronteras reafirma su preocupación por la multiplicación de supresiones de programas en los medios de comunicación locales, por presiones políticas. Tras la anulación de cinco programas desde enero de 2006, ahora le ha llegado la vez de desaparecer de la parrilla al programa “Voces de mi tierra”, difundido por las radios LU Provincia de Santa Cruz y LRA 59, en Gobernador Gregores (provincia de Santa Cruz). Presentado desde hace tres años por el periodista y animador Pablo Lagalle, el programa se emitía los domingos. El programa se ha suprimido a causa de un reportaje, en el que Pablo Lagalle denunciaba los graves peligros para la salud pública causados por las explotaciones mineras. Según la investigación llevada a cabo por el presentador, la extracción a cielo abierto, la utilización de cianuro y el despilfarro de agua, elemento vital en Patagonia, suponen importantes daños para los habitantes. Pablo Lagalle ha dicho a Reporteros sin Fronteras que el concejal Juan Vásquez había enviado un correo a Oscar Herrero y Sonia San Pedro, directores locales de LRA59, pidiéndoles una copia del programa. Inmediatamente, la dirección decidió retirarlo, dando unas excusas poco claras. _______________________________________________________ 14.06.06 - Continúan degradándose las relaciones entre la prensa y los poderes locales
Reporteros sin Fronteras deplora los atentados a la libertad de prensa, ocurridos en Quilmes (provincia de Buenos Aires), que ponen de manifiesto las crecientes tensiones existentes entre la prensa y las autoridades locales, desde la llegada al poder de Néstor Kirchner, el 25 de mayo de 2003. La prensa local de oposición denuncia la censura y la persecución que sufren, por parte de las autoridades de Quilmes. Una vez más, Reporteros sin Fronteras hace un llamamiento al presidente Néstor Kirchner, para que garantice la independencia de los medios de comunicación. Recientemente, Sergio Villordo, alcalde oficialista de Quilmes, intentó conseguir el cierre de dos emisoras de radio privadas, FAN 103.9 y Radio Quilmes 106.9. A mediados mayo, el Comité Federal de Radiodifusión (COMFER) decidió súbitamente retirarles los permisos para emitir. Los periodistas recurrieron ante el Congreso de la Nación. Finalmente, el 7 de junio, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad una resolución, exhortando al COMFER a adoptar las medidas necesarias para garantizar la continuidad de los dos medios de comunicación. Pedro Navarro, director de Radio Quilmes, ha explicado que el intento de Sergio Villordo estaba motivado por las investigaciones que los dos medios efectuaron sobre la gestión municipal, y entre otras cosas la utilización de los fondos público. Pedro Navarro ha añadido que las autoridades públicas locales dificultan, , a los medios de comunicación críticos, el acceso a las informaciones oficiales. Por otra parte, el 19 de mayo de 2006, Gustavo Orlando, director de Radio Plus, y Néstor Carrigall, periodista de la emisora, fueron agredidos en Quilmes por dos personas que circulaban en un coche, y que les apuntaron con una pistola. Les amenazaron de muerto y les advirtieron que pensaban conseguir que se cierre Radio Plus. También les aconsejaron que dejaran de manifestarse en contra de la censura. La víspera se celebró una manifestación, en señal de protesta por la política de discriminación y persecución sufrida por los medios de comunicación locales. Gustavo Orlando y Néstor Carrigall han presentado una denuncia en el tribunal penal de Quilmes, y han pedido al fiscal que se les ponga protección policial. _________________________________________________________ 9.06.06 - Reporteros sin fronteras manifiesta su apoyo a los periodistas movilizados contra las derivas autoritarias
Reporteros sin Fronteras está muy preocupada por las cada vez más frecuentes sanciones arbitrarias que adoptan las autoridades, contra medios de comunicación o periodistas críticos. Esa intolerancia se ha puesto ya de manifiesto en la supresión de programas, el despido de periodistas y la retirada, o a la atribución discriminatoria, de la publicidad pública. Desde que Néstor Kirchner llegó al poder, el 25 de mayo de 2003, no han cesado de degradarse las relaciones entre el gobierno y la prensa. “Las presiones políticas, procedentes de personas cercanas o aliados del jefe del Estado, continúan pesando sobre la libertad de expresión de determinados periodistas, tanto si están en medios privados como públicos. Manifestamos nuestra solidaridad con los periodistas que actualmente se movilizan contra los intentos del gobierno de Néstor Kirchner para silenciar las voces críticas”, ha declarado Reporteros sin Fronteras. El 6 de junio de 2006 fue despedida Marcela Pacheco, presentadora del informativo de media noche del canal público Canal 7, tras criticar la concentración que, el 25 de mayo, organizó el presidente de la República, para celebrar el tercer aniversario de su investidura. El 31 de mayo, la editora Perfil y el diario del mismo nombre cuestionaron ante los tribunales la política, que consideran discriminatoria, del gobierno con las revistas Noticias y Fortuna, y el diario Perfil, que carecen de publicidad pública. Ese mismo día, se reunieron algunas personalidades de la prensa argentina, para apoyar la iniciativa. Acusan al gobierno federal de distribuir de forma partidaria la publicidad pública, y de dificultar el acceso a la información oficial. El 3 de mayo fue suprimido el programa de opinión “Séptimo Día”, emitido por la emisora local Lu12 Radio Río Gallegos, como resultado de las presiones de Carlos Sancho, vicegobernador de la provincia de Santa Cruz (Sur). Según Héctor Barabino, presentador del programa, la directora y propietaria de Lu12, María Eugenia Sanhueza, recibió una llamada telefónica de un funcionario cercano a Carlos Sancho, quien le explicó que se retiraría la publicidad oficial concedida a la emisora si continuaba el programa. Dicha publicidad representa unos ingresos mensuales de 28.000 pesos (alrededor de 7.000 euros). Héctor Barabino no cambió el tono del programa que analiza, de forma crítica, la actualidad local y nacional. Entonces, y ante la negativa del periodista, la dirección decidió suprimirlo. Los días 5 de enero y 21 de abril de 2006, Reporteros sin Fronteras denunció la suspensión de dos programas de televisión y radio, como consecuencia de las presiones de las autoridades públicas, locales y nacionales. La organización se ha visto sorprendida, en varias ocasiones, por la reanudación de los obstáculos que encuentran los periodistas para acceder a las informaciones gubernamentales, y a los cargos oficiales, especialmente al jefe del Estado.
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Updated on 20.01.2016