Mientras la delegación olímpica china continúa recibiendo medallas en Atenas, en China prosigue la represión de periodistas e internautas. Reporteros sin Fronteras pide al Comité Olímpico Internacional que presione a Pekín para que se respete la libertad de expresión, antes de los Juegos Olímpicos de 2008.
A pocos días de la clausura de los Juegos Olímpicos de Atenas, en el transcurso de la cual se entregará la bandera olímpica al alcalde de Pekín, Reporteros sin Fronteras concede a China una medalla de oro suplementaria: la de la violación de los derechos humanos.
En efecto, durante el período de los Juegos Olímpicos no se ha interrumpido la represión contra los opositores, entre ellos periodistas y ciberdisidentes. China Popular es la mayor cárcel del mundo para los profesionales de la información. En ella se encuentran encarcelados, por delitos de opinión, veintisiete periodistas y más de sesenta internautas.
El célebre periodista Cheng Yizhong lleva cinco meses detenido sin juicio, por revelar un caso sospechosos de SRAS y la muerte por tortura de un estudiante, en una comisaría de Cantón. Dos de sus colegas han sido condenados a seis y ocho años de cárcel, por el mismo delito.
Para las autoridades chinas, los periodistas extranjeros siguen siendo sospechosos , y en ocasiones se convierten en el blanco de violencias y amenazas. El 7 de agosto de 2004 unos policías golpearon a un fotógrafo de la agencia Associated Press, y maltrataron a un colega de la Agencia France-Presse. Los reporteros cubrían los motines xenófobos que siguieron a la final de la Copa de Asia de Fútbol, en Pekín.
Por otra parte, el gobierno chino se ha equipado con un nuevo sistema de vigilancia en tiempo real de los SMS (mensajes escritos enviados por teléfono móvil). Esta nueva tecnología permitiría a las autoridades filtrar los mensajes en función de palabras-clave, y encontrar a los emisores de textos "reaccionarios". Ya ahora, el Ministerio de Seguridad Pública vigila ampliamente Internet e interfiere determinadas radios extranjeras.
Dentro de cuatro años se celebrarán los Juegos Olímpicos de Verano en Pekín. China está muy lejos de respetar los compromisos adquiridos ante el Comité Olímpico Internacional (COI), entre ellos el de la libre circulación de la información. El COI debe hacer todo lo que esté en su mano para conseguir que Pekín respete las libertades fundamentales; en caso contrario el espíritu olímpico se verá fuertemente maltratado, como ocurrió en el pasado en Moscú, cuando decenas de países boicotearon los Juegos de 1980, y la policía política detuvo a cientos de disidentes.
Tras haber llevado a cabo una campaña contra la candidatura de Pekín, Reporteros sin Fronteras creó www.boycottpekin2008.org, para movilizar a la opinión pública contra la dictadura del Partido Comunista Chino.