Nuevas amenazas contra periodistas en Bogotá
Organización:
_Carlos Lozano, director del periódico Noticias Uno, y su colega Hollman Morris, continúan estando amenazados como lo atestigua la presencia, el 2 de agosto de 2005, de unos individuos armados en moto, que les esperaban a la salida de un estudio de grabación de la capital. Los guardaespaldas, encargados de protegerles desde las amenazas que recibieron en el otoño de 2004, también notaron el sospechoso comportamiento de dos mujeres, particularmente atentas a los hechos y gestos de los periodistas, y de los invitados que les acompañaban. Carlos Lozano, Hollman Morris y Daniel Coronell, director del semanario Voz, recibieron el 16 de mayo unas coronas funerarias, junto con unas cartas en las que les amenazaban de muerte.
El coronel Luis Alfonso Novoa, coordinador del Departamento de Derechos Humanos de la policía nacional, está informado de los hechos. Ha manifestado que se siente preocupado al saber que los individuos sospechoso pertenecen al Departamento Administrativo de Seguridad, principal servicio de inteligencia en Colombia. El coronel se comprometió en empezar una investigación.
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20.05.05 - Reporteros son Fronteras condemna con tres organizaciónes más amenazas en contra de tres periodistas colombianos
El 16 de mayo de 2005, los periodistas Carlos Lozano, Daniel Coronell y Hollman Morris fueron amenazados por desconocidos en la ciudad de Bogotá, capital de Colombia. A todos les llegó un ramo fúnebre lamentando su muerte y, en uno de los casos, la de su familia. Dos coronas fúnebres llegaron en horas de la mañana a la antigua sede del noticiero Noticias Uno, dirigido por Daniel Coronell. Una de ellas lamentaba su muerte y la otra la de su esposa e hija. A Carlos Lozano, director del semanario Voz, le fue entregado hacia las 4:00 de la tarde, en su oficina, un arreglo floral que traía la siguiente dedicatoria: „de la familia Montoya para el sepelio de Carlos Lozano‰. La persona que hizo entrega de este ramo fue capturada, pero dejada en libertad por falta de pruebas. Hollman Morris recibió un ramo de rosas blancas en su casa, hacia las 7:50 p.m.. Éste fue entregado por un hombre alto, moreno y de acento de la costa y venía, según la tarjeta, lamentando su muerte de parte de la familia Henao. El 17 de mayo la Presidencia de la República publicó un comunicado en el que manifestó que las amenazas contra los periodistas „son un motivo de vergüenza para nuestra democracia‰. Agregó que: „La Seguridad Democrática es una política que garantiza la seguridad para todos los ciudadanos, sea cual sea su ideología, militancia política o credo que profese‰. Finalmente, reafirmó que los funcionarios públicos deben ayudar en la protección de los reporteros. El 18 de mayo los periodistas se reunieron con el Vicepresidente de la República y con representantes de la Policía, el Ministerio del Interior y de Justicia y la Fiscalía, con el fin de estudiar las acciones a tomar. Entre otras cosas, el gobierno se comprometió a brindarles la protección necesaria a ellos y a sus familias para que puedan seguir ejerciendo su labor. Por su parte, la Fiscalía se comprometió a asumir la investigación dentro de la Unidad de Derechos Humanos. Por último, la Policía organizará un grupo especial de investigación que apoyen a la Fiscalía en la investigación. Hasta el momento la Policía sólo ha podido establecer que dos de los tres ramos fúnebres fueron comprados en una floristería ubicada en Paloquemao, un barrio al centro occidente de la capital, y ordenados por otra floristería ubicada en la ciudad de Pereira, al sur occidente de Colombia. Coronell, Morris y Lozano le dijeron a las organizaciones que sus últimos trabajos tuvieron relación con la masacre ocurrida en San José de Apartadó, municipio ubicado en el departamento de Antioquia. Los tres directores tienen en común el ser reconocidos por informar de manera independiente frente al Gobierno. La Fundación para la Libertad de Prensa, el Instituto Prensa y Sociedad, Reporteros sin Fronteras y la Federación Internacional de Periodistas condenan fuertemente las amenazas dirigidas contra estos tres periodistas ampliamente reconocidos por la labor que realizan. De igual forma hacemos un llamado al gobierno para que cumpla con su obligación de proteger a estos periodistas y a sus familias y a la Fiscalía General de la Nación para que se investiguen las amenazas que impiden el libre ejercicio de su profesión.
El 16 de mayo de 2005, los periodistas Carlos Lozano, Daniel Coronell y Hollman Morris fueron amenazados por desconocidos en la ciudad de Bogotá, capital de Colombia. A todos les llegó un ramo fúnebre lamentando su muerte y, en uno de los casos, la de su familia. Dos coronas fúnebres llegaron en horas de la mañana a la antigua sede del noticiero Noticias Uno, dirigido por Daniel Coronell. Una de ellas lamentaba su muerte y la otra la de su esposa e hija. A Carlos Lozano, director del semanario Voz, le fue entregado hacia las 4:00 de la tarde, en su oficina, un arreglo floral que traía la siguiente dedicatoria: „de la familia Montoya para el sepelio de Carlos Lozano‰. La persona que hizo entrega de este ramo fue capturada, pero dejada en libertad por falta de pruebas. Hollman Morris recibió un ramo de rosas blancas en su casa, hacia las 7:50 p.m.. Éste fue entregado por un hombre alto, moreno y de acento de la costa y venía, según la tarjeta, lamentando su muerte de parte de la familia Henao. El 17 de mayo la Presidencia de la República publicó un comunicado en el que manifestó que las amenazas contra los periodistas „son un motivo de vergüenza para nuestra democracia‰. Agregó que: „La Seguridad Democrática es una política que garantiza la seguridad para todos los ciudadanos, sea cual sea su ideología, militancia política o credo que profese‰. Finalmente, reafirmó que los funcionarios públicos deben ayudar en la protección de los reporteros. El 18 de mayo los periodistas se reunieron con el Vicepresidente de la República y con representantes de la Policía, el Ministerio del Interior y de Justicia y la Fiscalía, con el fin de estudiar las acciones a tomar. Entre otras cosas, el gobierno se comprometió a brindarles la protección necesaria a ellos y a sus familias para que puedan seguir ejerciendo su labor. Por su parte, la Fiscalía se comprometió a asumir la investigación dentro de la Unidad de Derechos Humanos. Por último, la Policía organizará un grupo especial de investigación que apoyen a la Fiscalía en la investigación. Hasta el momento la Policía sólo ha podido establecer que dos de los tres ramos fúnebres fueron comprados en una floristería ubicada en Paloquemao, un barrio al centro occidente de la capital, y ordenados por otra floristería ubicada en la ciudad de Pereira, al sur occidente de Colombia. Coronell, Morris y Lozano le dijeron a las organizaciones que sus últimos trabajos tuvieron relación con la masacre ocurrida en San José de Apartadó, municipio ubicado en el departamento de Antioquia. Los tres directores tienen en común el ser reconocidos por informar de manera independiente frente al Gobierno. La Fundación para la Libertad de Prensa, el Instituto Prensa y Sociedad, Reporteros sin Fronteras y la Federación Internacional de Periodistas condenan fuertemente las amenazas dirigidas contra estos tres periodistas ampliamente reconocidos por la labor que realizan. De igual forma hacemos un llamado al gobierno para que cumpla con su obligación de proteger a estos periodistas y a sus familias y a la Fiscalía General de la Nación para que se investiguen las amenazas que impiden el libre ejercicio de su profesión.
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20.01.2016