El autoritarismo impide la mejora de la libertad de prensa en Asia

En neto progreso : Maldivas ; la caída más grande : las islas Fiyi Este año otra vez, los abusos de autoridad políticos perjudicaron mucho la libertad de prensa. Así pues, un golpe de Estado militar ha hecho perder a las islas Fiyi (152º) 73 puestos. Los militares se instalaron durante varias semanas en las redacciones para censurar los artículos antes de su publicación y unos periodistas extranjeros fueron expulsados. En Tailandia, el enfrentamiento sin fin entre "camisas amarillas" y "camisas rojas" tuvo un efecto muy negativo en el trabajo de la prensa. El reino se posiciona hoy en el puesto 130. El autoritarismo de los gobiernos establecidos, por ejemplo en Sri Lanka (162º) o en Malasia (131º), impide que los periodistas informen correctamente de los temas sensibles tales como la corrupción o los abusos contra los derechos humanos. El poder de Colombo mandó condenar a un periodista a 20 años de prisión y obligó a que se que exiliasen otras decenas de ellos. En Malasia, el Ministerio del Interior impone censura y autocensura amenazando a los medios de comunicación con retirarles su licencia y a los periodistas con estancias en la cárcel. La guerra y el terrorismo hacen estragos y colocan a los periodistas en una situación de precariedad extrema. Afganistán (149º) está minado por tantas violencias y amenazas de muerte de los talibanes, pero también por los arrestos no justificados cometidos por las fuerzas de seguridad. Asimismo, Pakistán (159º), a pesar de tener un paisaje mediático dinámico, sufre muchos asesinatos de periodistas y agresividad por parte de los talibanes y de algunos sectores del ejército. El país comparte con Somalia el récord del mundo de periodistas asesinados a lo largo del período estudiado. Los países menos respetuosos son, evidentemente, Corea del Norte, miembro del "trío infernal" de final de clasificación; Birmania, saturada de censura previa y encarcelamientos; y Laos, dictadura inmóvil donde ningún medio de comunicación privado está autorizado. En plena evolución, particularmente en cuanto a los medios de comunicación, China (168º) sigue siendo muy mal clasificada a causa de los encarcelamientos repetidos, sobre todo en Tíbet, de la censura de Internet y del nepotismo de las autoridades centrales y provinciales. De la misma manera, en Vietnam (166º), el partido único tiene en el punto de mira a periodistas, blogueros y militantes de la libertad de prensa por sus escritos sobre los favores que concede a China. En el capítulo de las buenas noticias, Maldivas (51º), beneficiándose de una transición democrática exitosa, gana 53 puestos. De la misma manera, Bután (70º) ha vuelto a ganar cuatro puestos gracias a nuevos esfuerzos a favor del pluralismo. Las escasas democracias del continente ocupan muy buenos puestos. Así pues, Nueva Zelanda (13º), Australia (16º) y Japón (17º) están clasificados entre los veinte primeros. El respeto de la libertad a informar y la ausencia de violencias apuntando a los periodistas les permiten a estos países ser líderes en Asia. En cambio, Corea del Sur (69º) y Taiwán (59º) han sufrido una caída este año. Corea del Sur pierde 22 puestos a causa del arresto de varios periodistas y blogueros y de los intentos de control de los medios de comunicación críticos por parte del gobierno conservador. En Taiwán, el nuevo partido en el gobierno también intentó influenciar a los medios de comunicación públicos y privados, y las violencias cometidas por algunos activistas perjudican la libertad de prensa. Dos recién llegados en la clasificación 2009 vienen del continente Asia-Oceanía. Papuasia-Nueva Guinea (56º) en un puesto muy honorable si tenemos en cuenta que es un país en desarrollo; y el sultanato de Brunei (155º) se encuentra en el tercio malo de la clasificación por la ausencia de prensa independiente.
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Updated on 20.01.2016