Cinco meses después de la ola de detenciones por las presidenciales en Venezuela, cinco periodistas han sido liberados, pero tres permanecen presos
El pasado mes de diciembre, los periodistas detenidos por cubrir las manifestaciones acontecidas en el marco de las elecciones presidenciales de julio de 2024 – Yuosnel Alvarado, Paúl León, Deysi Peña, Gilberto Reina y Ana Carolina Guaita – fueron liberados. Aunque este primer paso supone un alivio, Reporteros Sin Fronteras (RSF) manifiesta su preocupación por las restricciones judiciales que se les han impuesto y por el hecho de que otros tres periodistas permanezcan en prisión. La organización pide a las autoridades venezolanas que concedan plena libertad estos ocho profesionales de los medios.
De los ocho periodistas detenidos por haber cubierto las manifestaciones que se celebraron en el marco de las elecciones presidenciales de 28 de julio de 2024, cinco fueron liberados durante el mes de diciembre: Yuosnel Alvarado, el día 24; Paúl León el 22; Deysi Peña, el 11, y Gilberto Reina y Ana Carolina Guaita, el día 21.
Sin embargo, estos cinco reporteros están sometidos a restricciones judiciales: tienen que presentarse regularmente ante la Justicia, no pueden salir del país y tienen prohibido expresarse públicamente sobre sus casos. La falta de transparencia en torno a las condiciones de su liberación y a la situación en la que se encuentran sus causas judiciales genera incertidumbre y deja la puerta abierta a nuevos encarcelamientos y acciones legales en su contra. Por su parte, tres de sus compañeros de profesión permanecen presos: Luis López, Eleángel Navas y José Gregorio Camero.
““La liberación de estos periodistas es un primer paso, pero sigue siendo insuficiente mientras no recuperen su plena libertad y se retiren los cargos en su contra. RSF urge a las autoridades a acabar con las restricciones abusivas impuestas a todos ellos, así como con los procedimientos arbitrarios en su contra, y a liberar cuanto antes a sus colegas Luis López, Eleángel Navas y José Gregorio Camero, que siguen encarcelados.
Todos los periodistas fueron detenidos por presuntos cargos de “terrorismo”, “incitación al odio” y “asociación criminal”, unas graves acusaciones utilizadas habitualmente por el régimen para silenciar a las voces críticas, y que implican penas que van desde los 12 hasta los 20 años de cárcel. Desde las elecciones del 28 de julio de 2024, cuyos resultados no han sido reconocidos, las autoridades han recrudecido la represión contra los profesionales de los medios y han detenido al menos a nueve periodistas en el ejercicio de su labor o por causas relacionadas con ella.
La puesta en libertad de los cinco periodistas forma parte de una ola de liberaciones más amplia de presos políticos para responder a la presión interna e internacional.
