Carta a Obama: la prioridad de la libertad de prensa en Cuba

Barack Obama visitará Cuba la próxima semana. Desde 1928 ningún presidente estadounidense había realizado una visita oficial a la isla. En una carta abierta al Presidente de Estados Unidos, Reporteros sin Fronteras (RSF) pide a Obama que considere prioritarios los problemas relacionados con la libertad de prensa y el acceso a la información.


París, 18 de marzo de 2016


Señor Presidente,


Con ocasión de la visita histórica que usted realizará a Cuba la próxima semana, Reporteros sin Fronteras (RSF) le pide que considere una prioridad los problemas relacionados con la libertad de prensa y el acceso a la información. Como el primer presidente estadounidense en pisar tierra cubana desde hace 88 años, usted tiene el deber y el poder de influir positivamente en las políticas de la isla en este aspecto fundamental, abordándolo en sus conversaciones en privado con el Presidente cubano, Raúl Castro, y en sus discursos públicos. También tratándolo durante sus encuentros con la prensa y la sociedad civil cubana; hablando con ellos usted mismo podrá constatar en qué medida sus derechos son limitados.




Cuba ocupa el lugar 169, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa publicada por Reporteros sin Fronteras en 2015. El gobierno cubano monopoliza la información, no tolera ninguna voz independiente y prohíbe que existan medios de comunicación libres. Sólo están autorizados los medios “oficiales” y la lista es muy corta. Los medios de comunicación que no cuentan con una autorización oficial se consideran ilegales y son censurados.




En Cuba, no sólo los medios de comunicación locales se enfrentan al control de la información y a las prácticas de censura: también los reporteros extranjeros padecen restricciones. Las acreditaciones de prensa se les otorgan de forma selectiva y cuando se considera que un periodista extranjero presenta al régimen de una manera "demasiado negativa”, se le expulsa.



Más allá de la censura, el país tiene una larga historia de acoso y violencia contra los periodistas. Muchos de ellos han recibido amenazas del gobierno porque trabajan para medios de comunicación independientes. Roberto de Jesús Guerra, editor de la agencia de prensa independiente y organización de defensa de la libertad de prensa Hablemos Press, fue agredido por miembros del Departamento de Seguridad del Estado en junio de 2014. Ese mismo mes un corresponsal del mismo medio de comunicación fue atropellado por un coche. En julio de 2015 numerosos activistas y periodistas fueron detenidos durante las manifestaciones organizadas por el movimiento opositor Las Damas de Blanco. Los arrestos, la confiscación de su material profesional y las detenciones de corta duración son cotidianos para los periodistas que cubren este movimiento.



Desde 2010 numerosos periodistas han sido puestos en libertad. Sin embargo, algunos siguen tras las rejas, como Yoeni de Jesús Guerra García, bloguero independiente de la agencia Yayabo Press, condenado a 7 años de cárcel en marzo de 2014 por ‘sacrificio ilegal de ganado’. Él sostiene que estas acusaciones fueron fabricadas para poner fin a sus actividades periodísticas. En repetidas ocasiones el bloguero ha sido víctima de actos de violencia y de tortura infligidos por el personal de la prisión. En septiembre pasado, cuando el Papa Francisco visitó la isla, RSF pidió que fuera puesto en libertad, pero Yoeni sigue en prisión.



Si bien las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba se restablecieron el verano pasado, aún queda un largo camino para que mejore la libertad de prensa. En lo que va del año 2016 el gobierno cubano ha arrestado a tres periodistas, detenido a uno y prohibió que se distribuyera la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En febrero encontraron asesinado al periodista y librero Ángel Herrera Oviedo.



Además de los actos de violencia y de los arrestos de periodistas, Cuba se encuentra entre los peores países del mundo en lo que respecta al acceso a Internet. Fue hasta 2013 que se autorizó que los ciudadanos pudieran usar la Web y ésta está controlada por el gobierno. Según la Broadband Commission for Sustainable Development menos de 5% de los hogares cubanos tienen acceso a la Red; el país se ubica en el lugar 115, entre 133 países, en acceso a Internet. El trabajador humanitario estadounidense Alan Gross –puesto en libertad en 2014 gracias a los esfuerzos que usted realizó–, pasó cinco años en prisión por haber intentado ayudar a que los cubanos tengan acceso a Internet.


En esta nueva era que se abre para Cuba, deben caer las barreras interpuestas a la libertad de prensa. Estados Unidos tiene la oportunidad y la responsabilidad de contribuir a estos cambios. Llegó la hora de que los periodistas encarcelados sean puestos en libertad y de permitir que los medios de comunicación trabajen sin temor a la violencia o a los arrestos. Llegó la hora de garantizar que todas las voces cubanas sean escuchadas.



Le agradezco de antemano señor Presidente su atención a esta carta.


Atentamente,


Christophe Deloire,


Secretario General de Reporteros sin Fronteras

Publié le
Updated on 22.06.2016