La situación de la libertad de prensa se ha deteriorado en la región Asia-Pacífico, donde 26 de los 32 Estados y territorios que la conforman han visto descender su puntuación en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2024. Los regímenes dictatoriales de la zona estrechan cada vez con mayor vigor su control sobre la información.

Afganistán retrocede 26 posiciones y se sitúa en el puesto 178º, con tres periodistas asesinados y al menos 25 encarcelados. Corea del Norte (177º) y China (172º), con su represión absoluta de la prensa, se estancan en la parte baja de la clasificación. Vietnam (174º) y Birmania (171º) practican una política de encarcelamiento masivo de reporteros: ocupan respectivamente la cuarta y la segunda posición en la lista de las mayores prisiones de periodistas del mundo. En Camboya (151º), el aumento de las represalias gubernamentales contra el periodismo independiente ha hecho descender al país a la zona "roja" de la tabla, donde la situación de la libertad de prensa se considera "muy grave". En 2023, fueron asesinados dos periodistas en Filipinas (134º), que se mantiene como uno de los países más peligrosos de la región para los profesionales de los medios. 

Violencia preelectoral

En contextos electorales, la violencia contra los profesionales de la información ha empeorado en varios países de la región, con una impunidad casi total. En Bangladesh (165º) han sido asesinados tres periodistas. En Pakistán (152º), ha crecido el número de detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas de reporteros, mientras que en Indonesia (111º) los ataques se han dado en forma de agresiones físicas y en línea.

Legislaciones hostiles a la libertad de prensa

Algunos países registran una subida engañosa en la Clasificación - atribuible a movimientos de otros países - que enmascara un deterioro de su puntuación. Es el caso, en particular, de India (159º), que sigue estancada en una posición indigna de una democracia, tras la reciente adopción de un nuevo paquete de leyes represivas. A la vez, Hong Kong (135º) gana cinco puestos, pero su puntuación disminuye, y se observa un aumento de la represión de los periodistas en virtud de la ley de seguridad nacional impuesta por Pekín en 2020. 

La libertad de prensa, atacada en las democracias

La censura reaparece en varios países donde la situación de la prensa había mejorado en los últimos años. En Corea del Sur (62º), el gobierno amenaza a varios medios con acciones judiciales por presunta difamación. También en Mongolia (109º) se ciernen medidas censoras sobre los profesionales de la información, mientras que en Malasia (107º) se bloquean regularmente las webs de información críticas con el gobierno. 

Los alumnos ejemplares de la libertad de prensa en la región

Cabe destacar este año que ningún país de la región Asia-Pacífico figura entre los 15 primeros de la Clasificación, debido en parte a que Nueva Zelanda (19º) desciende seis puestos, aunque mantiene su posición de líder regional. Las democracias de la región, como Timor Oriental (20º), Samoa (22º) y Taiwán (27º), se mantienen como modelos de libertad de prensa, a pesar de los retos que afrontan en materia de derecho a la información.