Reporteros sin Fronteras teme que tristemente se reproduzca la violencia contra la prensa, tras un año 2005 marcado por más de sesenta agresiones y amenazas. Una vez más, la organización denuncia la implicación de los poderes públicos locales en muchos de los casos y hace un llamamiento a los candidatos a las elecciones generales del 9 de abril, para que se comprometan claramente con la libertad de informar.
Reporteros sin Fronteras teme que los malos tratos infligidos a los periodistas por algunos responsables políticos locales en los primeros meses del año 2006, presagien un balance tan sombrío como el de 2005. El año pasado, la organización contabilizó hasta 62 casos de amenazas o agresiones a la prensa. Desde el comienzo del año 2006, 9 periodistas han sufrido ese tipo de ataques, que frecuentemente proceden de las autoridades locales. Reporteros sin Fronteras hace un llamamiento a los candidatos a las elecciones generales del 9 de abril, para que se pronuncien sobre la libertad de informar.
« Perú tiene un triste récord de agresiones a los medios de comunicación en el continente americano. Los poderes públicos tardan en ver la magnitud del fenómeno, y con razón ya que participan ampliamente en él. La campaña para las elecciones presidenciales y legislativas del 9 de abril hace temer un nuevo período de violencia suplementaria. Esta situación debe obligar a los candidatos a adoptar compromisos claros sobre la libertad de informar, y la libertad de expresión », ha declarado Reporteros sin Fronteras.
El 24 de febrero de 2006, en Aucayacu (Centro), un grupo de policías a las órdenes del capitán Mendoza acudió a la sede de radio Amistad y pidió al único empleado presente, Edwin Revilla, técnico de sonido, que le proporcionara informaciones precisas sobre los periodistas y los responsables de la difusión, así como sobre el funcionamiento y las licencias concedidas a la emisora. Según Vladimir Angulo, periodista de radio Amistad, quien por otra parte denunció los hechos, esa actuación intimidante podría estar relacionada con el caso de la muerte del jefe terrorista Héctor Aponte Sinarahua, apodado « Clay », abatido por la policía el 19 de febrero de 2006. El 20 de febrero, la radio emitió las declaraciones de un testigo, quien asegura que el jefe terrorista no murió en un enfrentamiento, como afirma la versión oficial. La policía le habría acribillado sumariamente a balazos. El comisario de Aucayacu, comandante Roger Rossi Denegri, dijo al Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) que él no había ni ordenado ni autorizado la irrupción policial.
Por otra parte, el 28 de febrero, mientras cubrían una manifestación en Tarapoto (Norte), Felipe Tipián y el camarógrafo Levis Cárdenas, del programa televisivo « Enfoques » del canal Red Global, fueron agredidos por el funcionario municipal Carlo Magno Pasquel, quien intentó arrollarles con una moto e hirió al cama5rógrafo en una pierna. Después se bajó de la moto e insultó a los periodistas, que le habían implicado en algunos casos de mala gestión local.
Finalmente, el 8 de febrero a primeras horas de la tarde, en el transcurso de un mitin del candidato a las elecciones presidenciales Ollanta Humala Tasso, organizado en el distrito de Comas (al norte de Lima), Karina Chávez, encargada del programa televisivo « Prensa Libre », fue injuriada y agredida por un grupo de simpatizantes del candidato. Recibió un puñetazo en la cara, y escupitajos.