África
Angola
-
Clasificación 2023
125/ 180
Puntuación: 48,3
Indicador político
137
43.57
Indicador económico
163
31.79
Indicador legislativo
125
51.21
Indicador social
126
54.71
Indicador de seguridad
104
60.20
Clasificación 2022
99/ 180
Puntuación: 57,17
Indicador político
100
52.83
Indicador económico
127
35.03
Indicador legislativo
106
61.11
Indicador social
75
73.00
Indicador de seguridad
97
63.87

Tras 40 años de reinado del clan Dos Santos, la llegada al poder del nuevo presidente Joao Lourenço, en septiembre de 2017, no ha supuesto ningún cambio en la libertad de prensa. La censura y el control de la información siguen afectando a los periodistas angoleños.

Panorama mediático

El panorama mediático angoleño está marcado por la predominancia de los medios del Estado. Sobre aproximadamente 120 emisoras de radio, una veintena son privadas y solo dos, Rádio Ecclesia, ligada a la iglesia católica, y Rádio MFM, son consideradas como independientes. Existen tres canales de televisión públicos y algunos canales privados. En 2020, las cadenas privadas TV Zimbo y Palanca TV pasaron a estar bajo el control del gobierno. De los numerosos diarios privados que emergieron con la llegada del multipartidismo en 1992, sólo cuatro existen todavía en papel.

Contexto político

Tras una aparente apertura en 2017, el presidente Lourenço ha limitado sus intercambios con los medios y han quedado reducidos a una conferencia de prensa de formato muy limitado: cinco medios invitados, dos preguntas para cada uno y sin posibilidad de repreguntar. El acceso a las informaciones públicas y a las fuentes gubernamentales es muy complicado; así, la censura y autocensura siguen estando presentes. El partido en el poder está sobrerrepresentado en los medios, particularmente en la Televisión pública de Angola (TPA). Numerosas peticiones de licencias están en suspenso en el Ministerio de Telecomunicaciones, acusado de obstaculizar las iniciativas de personas o grupos fuera del ámbito gubernamental.

Marco legal

Una serie de leyes aprobadas en 2016  obligan a los medios audiovisuales a retransmitir las declaraciones oficiales del presidente. La despenalización de los delitos de prensa, reclamada por los profesionales del sector, sigue haciéndose esperar. No obstante, hay ciertos signos esperanzadores tras la absolución judicial de dos periodistas de investigación en 2018 y el reconocimiento de que habían ejercido su “obligación de informar con total objetividad”.

Contexto económico

En los últimos años, muchos periódicos han quebrado, tras haber sido recomprados por personas ligadas al partido en el poder, otros no han sobrevivido por las dificultades financieras. Los costes desorbitados de las licencias de radio y televisión son un freno para el pluralismo.

Contexto sociocultural

La sociedad angoleña está marcada por la influencia del cristianismo. Los temas relacionados con la religión, la iglesia o la sexualidad se abordan con mucha prudencia, en el caso de que no hayan sido silenciados. La presencia de mujeres en las redacciones es escasa. Por último, los grupos étnicos minoritarios están mal representados en los medios y en la cobertura de temas que les conciernen.

Seguridad

Resulta todavía frecuente que los periodistas sean procesados y condenados, a veces  severamente, si realizan investigaciones sobre el gobierno o el sistema judicial. En 2021, el director de publicación del portal de periodismo de investigación A Denúncia fue condenado a dos años de prisión y 180.000 euros de multa por difamación y “abuso de la libertad de prensa”, por investigar una adquisición sospechosa de un terreno por parte del fiscal general adjunto. En los últimos años, algunos periodistas han sido detenidos brevemente o agredidos.

Ataques en tiempo real en Angola

Asesinados a partir del 1 de enero de 2024
0 periodistas
0 colaboradores de medios
0
Detenidos actualmente
0 periodistas
0 colaboradores de medios
0