Tuquía. Implacable acoso a Halk TV y Fox TV, los dos últimos canales de televisión críticos

Reporteros sin Fronteras (RSF) lamenta las fuertes multas y las suspensiones de programas impuestas a dos canales de televisión turcos, Halk TV y Fox TV de Turquía, como consecuencia de los ataques orquestados contra ellos en los medios gubernamentales. Para la organización, este acto de censura tiene como objetivo aplastar los últimos vestigios de independencia en los medios turcos.

El Consejo Superior de Radiodifusión (RTÜK) impuso las sanciones draconianas a los dos canales de televisión el 26 de diciembre, después de que criticaran al gobierno. Fox TV, una empresa conjunta estadounidense y turca, fue multada con 1 millón de liras turcas (165.000 euros) y su principal programa de noticias fue suspendido durante tres días.

 

Halk TV, un canal kemalista, fue multado con 80,000 liras turcas (13,000 euros) y su programa de entrevistas "Halk Arenası" fue suspendido durante cinco días. Si se produjeran quejas adicionales, RTÜK podría despojar a ambos canales de televisión de sus licencias de emisión.

 

La sanción a Halk TV fue por el programa "Halk Arenası" del 21 de diciembre, en el que dos invitados, los conocidos actores Metin Akpınar y Müjdat Gezen, advirtieron sobre la polarización y el peligro de un golpe de Estado provocado por las tendencias y el acercamiento "fascistas" del gobierno con Rusia. El periodista Yılmaz Özdil dijo que Turquía sería un lugar mejor si el presidente "bebiera solo una cerveza".

 

Fox TV de Turquía fue castigado por su principal programa informativo del 10 de diciembre, en el que el presentador Fatih Portakal, al comentar las protestas de los ‘chalecos amarillos’ en Francia, lamentó que el derecho a la protesta no estuviera garantizado en Turquía.

 

Impuestas con una velocidad inusual, las sanciones de RTÜK culminan una campaña de ataques que se ha orquestado al más alto nivel. El presidente Erdoğan ha atacado repetidamente a los responsables de los comentarios críticos, ha advertido que "lo pagarían" y ha llegado a dirigirse a Portakal diciendo: "Si no sabes cuál es tu sitio, esta nación te partirá el cuello".

 

Contra Fox TV y Halk TV se presentaron muchas quejas judiciales mientras se desataba una violenta campaña contra ellos en los medios gubernamentales. Los partidarios del gobierno se manifestaron frente a la sede de Fox TV el 26 de diciembre, cantando el nombre de Erdoğan, y Portakal informó de que se habían proferido amenazas de muerte contra él.

 

"Condenamos estas sanciones desproporcionadas, que son un acto de censura diseñado para frenar los últimos canales de televisión críticos del país", denuncia Johann Bihr, jefe de la oficina de RSF en Europa del Este y Asia Central. “Esta presión es aún más perturbadora, pues respalda lo que ha sido una campaña de odio inaceptable. Instamos a las autoridades turcas a que dejen de jugar a este peligroso juego y a que respeten la libertad de expresión".

 

Fox TV es el último de los diez canales de televisión más vistos en Turquía que no pertenece a un aliado gubernamental. La politización del RTÜK, cuyos miembros son nombrados por el Parlamento, se ha vuelto cada vez más marcada en los últimos años.

 

La ya preocupante situación de los medios de comunicación de Turquía se ha vuelto crítica desde el fallido golpe de Estado de julio de 2016. Se han cerrado muchos medios de comunicación sin ningún tipo de recurso efectivo, se celebran juicios masivos y Turquía ahora tiene el récord mundial de periodistas profesionales en prisión. En 2018 ocupa el puesto 157, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras.


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Updated on 28.12.2018