Medidas judiciales contra dos corresponsales de una radio comunitaria a pesar de la falta de condena sobre el fondo

El destino se sigue ensañando con los medios de comunicación comunitarios tras el cierre provisional de la emisora garífuna Radio Faluma Bimetu, el 14 de enero de 2011 en Tela (Norte). El mismo día, comparecieron ante el tribunal de Amapala (Sur), Elia Xiomara Hernández y Elba Yolibeth Rubio, corresponsales de la radio La Voz de Zacate Grande, y se les impuso un absurdo control judicial en ausencia de condena sobre el fondo. Las dos mujeres fueron arrestadas junto con doce personas más por las fuerzas del orden, el 15 de diciembre de 2010, durante una operación de expulsión en el municipio de Coyolito, en la Península de Zacate Grande. En principio, el tribunal de Amapala tenía que dictar la sentencia el 11 de enero sobre el posible juicio por “sedición” y “desobediencia civil” cuando las periodistas sólo hacían su trabajo . Ahora bien, sin que tomara una decisión sobre este punto ni que se pronunciara sobre el fondo, el tribunal dictaminó para todos los procesados un control judicial que prevé: -la prohibición de salir del país
-la obligación de solicitar un permiso judicial para salir de Coyolito
-la obligación de presentarse ante un juez cada quince días
-la prohibición de participar en manifestaciones públicas.
Además, se les prohíbe a Elia Xiomara Hernández y a Elba Yolibeth Rubio ponerse en contacto con la comunidad de Coyolito. Pedimos que se anulen estas medidas de censura que representan un insulto a la vez a la libertad de informar y a la de ir y venir. ¿Que se le reprocha a las dos periodistas? Pertenecer a un medio de comunicación que le da la palabra a una comunidad oprimida. La Voz de Zacate Grande ya fue acallada durante un operativo policial y militar de gran envergadura en junio de 2010. La criminalización de los medios de comunicación comunitarios se ha convertido en una norma desde el golpe de Estado del 28 de junio de 2009. Vídeo del operativo del 3 de junio de 2010:

__________________ 18.01.11 - Blanco de un incendio criminal hace un año, una radio comunitaria se apaga ante la amenaza
Propiedad de la comunidad hondureña de origen africano (garífuna) de Triunfo de la Cruz, la emisora Radio Faluma BimetuRadio Coco Dulce en español – ha decidido abandonar temporalmente sus actividades, el 14 de enero de 2011, ante la amenaza de las autoridades locales y de las fuerzas del orden. Una delegación del municipio de Tela, a la que acompañaba unos policías, llegó a la comunidad, el 12 de enero de 2011, para imponerle un nuevo patronato a su gusto. Por su parte, la comunidad de Triunfo de la Cruz ya había previsto unas elecciones para el próximo 28 de enero para designar a su patronato. Ante la negativa de las comunidades a aceptar dicho procedimiento, los visitantes amenazaron con quemar a Faluma Bimetu. Esta amenaza recuerda el incendio criminal que destruyó por completo la emisora el 6 de enero de 2010. Junto con la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (Amarc) e International Media Support (IMS), Reporteros sin Fronteras colaboró en la reconstrucción de Radio Faluma Bimetu (escuchar también: http://www.agenciapulsar.org/audios...) La comunidad garífuna se opone desde hace mucho tiempo a unos proyectos inmobiliarios en la zona atlántica y lo manifiesta a través de sus pequeños medios de comunicación. Ha aumentado la persecución contra Radio Faluma Bimetu desde el golpe de Estado del 28 de junio de 2009. Alfredo López, uno de sus principales locutores, fue secuestrado por el ejército y la policía el 12 de agosto de 2009. La situación es similar para el conjunto de los movimientos sociales o comunitarios y sus soportes de expresión, por supuesto sin tener en cuenta la Convención Americana de Derechos Humanos, ni tampoco aplicar las medidas ordenadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Así pues, el 5 de enero de 2011, dos individuos vestidos de uniforme de técnicos del Servicio de Medición Eléctrico de Honduras (Semeh) irrumpieron en el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) en La Esperanza (noroeste de Tegucigalpa). Amenazantes con las personas presentes, los asaltantes, que pretendían trabajar para el Estado hondureño, cortaron la luz del local. Las radios comunitarias Guarajambala y La Voz Lenca dejaron enseguida de emitir. En la región de Zacate Grande (Sur), el acoso sigue contra la radio del mismo nombre y la comunidad que le permite existir, en conflicto con el magnate de la agroindustria, Miguel Facussé Barjum. “La lucha contra la impunidad pasa no sólo por el esclarecimiento de los diez asesinatos de periodistas cometidos en 2010, tal como declaró hace poco el gobierno mientras que tardan en darse los resultados de las investigaciones. Es también obvia la necesidad de proteger realmente a los medios de comunicación minoritarios y a sus representantes, en particular a las víctimas de represalias relacionadas con el golpe de Estado. Las frecuencias de las radios comunitarias atacadas se deben restablecer sin más demora”, declara Reporteros sin Fronteras.
Publié le
Mise à jour le 20.01.2016